La Consejería de Medio Ambiente presentó ayer 21 de los 64 nuevos vehículos que pasarán a reforzar los medios del servicios de limpieza de la Ciudad. Se espera que el proceso de renovación de la flota actual concluya sobre el mes de febrero, momento en el que además se llevará a cabo el plan de sustitución de los contenedores de basura de la ciudad con los más de mil depósitos encargados. Según detalló el consejero de Medio Ambiente, Manuel Ángel Quevedo, ayer se presentaban 21 de los 64 nuevos vehículos que se han encargado, los que ya estaban en stock de las empresas suministradoras o que "son más fácil de montar". En concreto, han llegado 17 furgonetas de caja abierta basculante para la recogida de residuos, dos barredoras de gran volumen para trabajar en calzada y una más para aceras, y una pala cargadora.
La incorporación de estos elementos permitirán sustituir el material obsoleto. Sobre enero se espera que lleguen "los vehículos de encargo, como los recolectores de contenedores de última generación que son automáticos". El conductor sólo tendrá que situarse junto al contenedor y la máquina "con sensores y rayos infrarrojos, levanta el contenedor que se abre por abajo". También en enero se pondrá en marcha el nuevo sistema de contenedores de basura.
A esto se añaden los cinco puntos limpios móviles que se ha creado "para depositar hasta veinte fracciones distintas, como son las cosas raras, caso de radiografías, cds, etc. Estos puntos se están fabricando y vienen en diciembre. También ese mes llevan 75 muevas jaulas para cartón a instalar en el Sepes y la frontera".
Además de los vehículos, explicó que se ha creado una nueva marca corporativa para el servicio de limpieza, como es el lema "Melilla más limpia…entre todos" en un fondo de color verde, que sustituirá las pegatinas con el escudo de la Ciudad Autónoma que se añadía a furgonetas y camiones de limpieza. "Hemos querido destacar que en Melilla necesitamos la colaboración de todos para que esté limpia, porque nosotros ponemos los medios, pero es preciso que los melillenses se impliquen", dijo.
Confía el consejero en cumplir los plazos marcados del mes de febrero para incorporar todas estas novedades y que son fruto del nuevo contrato de limpieza adjudicado este verano y que tiene un coste anual de 13 millones de euros. Reconoció que todo este proceso de renovación de vehículos se ha retrasado por el recurso que presentó la empresa que quedó en segundo lugar en el concurso de limpieza.
Por su parte el presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, que destacó que los vehículos adquiridos son de última generación que incluso "hay barredoras que podrán entrar en la playa", incidió en el mensaje de la nueva marca corporativa y en la necesidad de que los melillenses colaboren en este objetivo de mantener Melilla limpia.
