El consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, considera que fueron “mal asesoradas” las dos madres marroquíes que fueron detenidas tras negarse a abandonar urgencias y a las que se les retiraron sus hijos de corta edad mientras se aclaran la situación, pero informa que esos dos bebés llevan tiempo recibiendo atención médica en Melilla por sus graves dolencias. Explicó el consejero que como ocurre con otros niños marroquíes que son atendidos en la sanidad melillense, estas dos menores, una de casi cuatro años y otra de año y medio, también venían recibiendo cuidados médicos en la ciudad desde hacía tiempo.
Protocolo
De hecho, tras haber sido tratados en urgencias, se les comunicó a las madres que acudieran a la cita médica pertinente pero el problema es que, en esta ocasión, ambas mujeres, se negaron a marcharse del centro hospitalario por lo que se llamó a la policía que las detuvo y “se aplicó el protocolo” de llevar los niños a servicios sociales.
“Es una práctica que se repite en ocasiones con los problemas que tenemos en frontera, de que algunos niños son retirados de los padres por diversos motivos, ya sean legales, y son llevados a la Ciudad para que sean atendidos, pero no ha habido en estos casos retirada de la custodia”, precisó. De hecho “se tiene la guarda hasta que se resuelva la situación que condujo a esta retirada” y ahora serán los técnicos, en base a los informes elaborados, los que determinarán el momento de la devolución de las dos niñas, algo que el consejero espera se produzca en las próximas horas. También negó que a la madre lactante se le haya impedido dar de mamar a su bebé.
En opinión del consejero, estas dos madres fueron “mal asesoradas por personas que echan leña al fuego” y lamenta el contenido de la denuncia de CPM, “que debería tener cuidado con lo que dice porque se pueden encontrar con una denuncia cuando habla de secuestro de menores”. “A CPM le gusta hacer mucho ruido y están equivocados, tal vez cabreados por lo que viven en su partido a nivel interno, y creo que esto les lleva a actuar de manera impulsiva y sin pensar las consecuencias”, afirma. Es más, asegura el consejero que la viceconsejera Francisca Conde habló con varios miembros de CPM para aclararles lo ocurrido con estos bebés, pero “hacen oídos sordos a lo que se les dijo y sacaron un comunicado para montar el circo”.
“Los malos asesores que malmeten a muchas personas que llegan de Marruecos, deberían pensárselo un poco porque las únicas personas que han generado daño son estas dos señoras que montaron este pollo”, señaló. No duda el consejero que actuaron “con buenas intenciones, porque si les dicen que hagan ruido para que sus hijos sean mejor atendidos, todos actuaríamos igual”, pero las perjudicadas han sido ellas y sus hijos.
