En la semana previa a las fiestas navideñas se han producido 41 ingresos de menores extranjeros no acompañados en el Centro de la Purísima, de los que siete contaban con tarjeta de identidad marroquí, según denuncia el consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, que afirma que es preciso reforzar el control fronterizo. También confirma que en enero los gobiernos de Ceuta y Melilla se reunirán para consensuar una postura conjunta sobre menores que defender ante Madrid. El consejero de Bienestar Social de Melilla, Daniel Ventura, insta a la delegada del Gobierno en la ciudad, Sabrina Moh "a que tome medidas urgentes en la frontera", habida cuenta de que continúa la entrada de menores extranjeros no acompañados (MENA) del país vecino.
Entradas
De hecho señala que entre el 17 y el 23 de diciembre se han producido en el centro de Purísima 42 ingresos de menores, de los que 21 son reingresos, 14 menores nuevos y 7 con tarjeta de identidad marroquí. "Seguimos con el suma y sigue de la entrada de menores por frontera", denuncia el consejero.
La consecuencia de ello es que a fecha del 23 de diciembre, el Centro de Purísima cuenta con 645 residentes; el Centro Asistencial 139; el centro de reforma 48; Divina Infantita 32 divina; y 15 en centros peninsulares.
Daniel Ventura, a tenor de estas cifras, le señala a la delegada del Gobierno en Melilla, Sabrina Moh que "es necesario más control fronterizo" y afirma que aún "estamos esperando las medidas que prometió", así como su anuncio de que "solucionaría todos los problemas en 20 días, ya han pasado varios meses".
Encuentro entre Ceuta y Melilla y cambios legislativos
Daniel Ventura recuerda que a mediados del próximo mes de enero se producirá el anunciado encuentro entre los presidentes de las dos ciudades autónomas para seguir avanzando en la elaboración de una propuesta conjunta que presentar ante el Ejecutivo central en materia de menores extranjeros no acompañados.
El consejero melillense señala que se trata de "una reunión muy importante" que responde a los encuentros previos celebrados entre ambas partes. "Lo que pretendemos es que entre los dos gobiernos podamos cerrar todas las consideraciones que se han expuesto en estos meses de contacto y seguir avanzando para cerrar una postura conjunta" en materia de menores.
Ambos gobiernos apuestan por proponer "modificaciones de tipo legislativas" en la Ley del Menor, unos cambios que "si no se llevan a cabo, nada cambiará". Lo que lamenta el consejero es que en este asunto de los menores extranjeros no acompañados "todo el mundo mira para otro lado, tanto Marruecos, como el Gobierno español y la propia Unión Europea, aunque también ha quedado demostrado que las comunidades autónomas no son partícipes de este problema y no lo quiere compartir con las comunidades que sí lo padecemos, ni nada por el estilo". El hecho de que Ceuta y Melilla "se encuentran solas" afrontando esta presión migratoria, "no les queda más remedios a los dos presidentes de proponer modificaciones legislativas".
Habrá que conocer en qué sentido irán la propuesta de cambios en la Ley del Menor, pero sí que ambos gobiernos se han posicionado a favor de incluir la figura del migrante precoz para diferenciar a aquellos menores en situación en desamparo con los que se convierten en inmigrantes a iniciativa propia o de sus familias.
Lo que sí ha dejado claro la Ciudad Autónoma de Melilla, tanto por parte del presidente Imbroda como por boca del consejero de Servicios Sociales, es que lo adecuado sería instar a Marruecos a cumplir el acuerdo de readmisión de menores que no se ha cumplido hasta ahora, promoviendo, en primer lugar, la reintegración de aquellos menores acogidos en Melilla que cuentan con documento de identidad marroquí.
