El roscón de Reyes cada vez se puede encontrar más variado, con diversos rellenos o de diferentes tamaños para todas las familias pero siempre al gusto de cada melillense. Pueden ser desde los tradicionales roscones sin rellenar hasta los que van rellenos de nata, chocolate, crema pastelera, trufa o al gusto del cliente pudiendo ser de ‘nutella’ o ‘kinder’. En La Casita del Chocolate únicamente en estos días venderá alrededor de 800 y 1.000 kilos de roscón. Ya vienen los Reyes Magos de Oriente y lo único que no puede faltar en los hogares melillenses es el roscón. Pudiendo estar relleno o no, pero siempre al gusto de cada paladar y de cada familia para reunirse y comerlo juntos mañana.
Tradicional del día 6
Eduardo Ortega, propietario de La Casita de Chocolate que se encuentra en General de Aizpuru número 3, explicó a este Periódico que en la confitería se pueden encontrar tres tamaños de roscón de Reyes: grandes, medianos y pequeños. Además, se pueden rellenar al gusto del cliente como de nata, crema pastelera, chocolate, trufa o el tradicional, que va sin rellenar.
Asimismo, los clientes pueden pedir el roscón relleno de lo que más le apetezca como nutella, kinder bueno, Ferrero, aunque hay que llamar antes al 952670690 para encargarlo.
Sobre los tamaños, señaló que el roscón grande es de cerca de dos kilos para ocho o diez personas, el mediano de un kilo para cuatro o cinco personas y el pequeño de medio kilo relleno que es como para dos personas.
En cuanto al que más se suelen llevar los melillenses, respondió que el de crema pastelera y el de nata. El que más le gusta a Ortega es el de crema pastelera que es la que se hace artesanalmente y es parecida a la de los famosos cortadillos de Melilla.
Elaboración del roscón
Sobre si es complicado hacerlos, respondió que “tiene su complicación pero para la elaboración del roscón de Reyes hay que hacer una masa madre primero con levadura tipo brioche, con las maquinas es más fácil, hay que vigilarla y mirarla bien para que tenga un proceso de fermentación bueno y que no salga ni crudo ni quemado”.
Después, Ortega manifestó, que se forma el rosco con un agujero grande en el centro, se deja que fermente, se decora y se mete en el horno. Más tarde, hay que esperar un poco para que se enfríe bien y antes de rellenarlo se pone la figura y el haba.
Respecto a las decoraciones, el propietario expuso que se suele poner la fruta escarchada tradicional de siempre con la guinda, calabaza verde, roja, y lo que es la naranja confitada además de fideos de chocolate y azúcar.
También, en la caja se incluye la corona de rey, la sorpresa y el haba, que quien la encuentre deberá pagar el roscón.
En cuanto a si los melillenses son previsores, resaltó que “hay algunos que vienen antes para quitarse el gusto pero normalmente lo compran el día 5 de enero para amanecer el día 6 con el roscón en casa para el desayuno”.
“Incluso hay gente que durante el año ha venido y nos ha preguntado que si tenemos roscón y alguno que otro hemos hecho por encargo”, expresó.
El propietario de La Casita de Chocolate desea unos felices Reyes y recordando que ya se cumplen 25 años de la confitería.
