Sobre las 3 de la madrugada del 6 de julio del pasado año, dos hombres asaltaron a una pareja de jóvenes en el barrio del Real. La citada pareja salía del Pub Duna y se dirigía de vuelta a casa cuando los acusados presuntamente los abordaron con el pretexto de pedir un cigarro; posteriormente esgrimieron un cuchillo contra ellos y les pidieron los móviles y el dinero. Los acusados se hicieron con las carteras, los móviles y el bolso de los denunciantes, y huyeron del lugar de los hechos. Días después, los perjudicados señalaron a los acusados durante un reconocimiento fotográfico. El Ministerio Fiscal interesó para los acusados, que tienen antecedentes penales, la imposición de una pena de 3 años de prisión por un delito de robo con violencia con el agravante de instrumento peligroso (por el cuchillo), mientras que la defensa pidió su libre absolución alegando un error en la identificación de los acusados. El 6 de julio de 2018, sobre las 3 de la madrugada, una pareja fue asaltada por dos hombres en el umbral de un portal situado en la calle Infanta Elena (barrio del Real).
Según la versión del Ministerio Fiscal, la pareja volvía a casa tras haber salido al Pub Duna cuando dos hombres los abordaron pidiéndoles un cigarro. Al negarse, los asaltantes pasaron a pedirles los móviles y el dinero, esgrimiendo contra ellos un cuchillo de grandes dimensiones. Uno de los hombres registró a la joven, quitándole el bolso y el móvil; el otro perjudicado también perdió el teléfono y la cartera. Tras el robo, les dijeron: “nada de Policía”, y huyeron del lugar. Los efectos no han sido recuperados.
Los perjudicados reconocieron a los acusados días después, durante un reconocimiento fotográfico, “sin género de dudas”.
Los acusados, que a pesar de contar con documentación nacional (DNI) necesitaron de la asistencia del intérprete de los juzgados, negaron rotundamente los hechos.
Ambos alegaron que no se conocían entre sí. Uno de ellos afirmó que, por su trabajo de porteador, a esa hora de la noche se encontraba en el lado marroquí, preparando el trabajo del día siguiente. El otro declaró que estuvo en Nador hasta el día 11 de julio.
Ambos acusados tienen antecedentes penales por robo con violencia, siendo los hechos muy similares.
El Ministerio Fiscal interesó para ambos la imposición de una pena de 3 años de prisión por un delito de robo con fuerza con la agravante de instrumento peligroso, y se opuso a una posible suspensión de la ejecución de la condena, dados los antecedentes penales de los acusados.
La defensa atribuyó la causa contra sus patrocinados a un error en la atribución del delito y pidió su absolución, alegando que el reconocimiento fotográfico fue 8 días después y que a los acusados no se les intervino ningún efecto personal de los denunciantes.
Uno de los acusados hizo uso de su derecho a la última palabra para proclamar su inocencia y señalar al supuesto autor: “se quien fue el que les robó, se parece a mi, también tiene una cicatriz; trabaja en la frontera […] llevo 16 años en Melilla y desde el Centro de Menores no he tenido ningún problema”, concluyó.
