La Comunidad Islámica Imam Malik ha emitido un comunicado en el que, atendiendo al comienzo de la precampaña electoral para las elecciones de mayo, advierte a las diferentes formaciones políticas de que no tolerará el uso del Islam o de los musulmanes “como arma política”. La Asociación señala a ambos extremos del espectro político, y rechaza tanto el mensaje de odio de la extrema derecha como la “hipocresía pura” de la extrema izquierda; los miembros de Imam Malik piden a los partidos que actúen de manera responsable y se abstengan de utilizar a los musulmanes como moneda de cambio electoral. Desde la Comunidad Islámica Imam Malik han emitido un comunicado con motivo del inicio de la precampaña electoral, anunciando que no consentirán que “ningún partido político” utilice el Islam o a la comunidad musulmana para sacar rédito electoral; “queremos mandar un mensaje bien claro, y es que no vamos a consentir que ningún político utilice al Islam o a los musulmanes como armas electorales”, sostienen.
Desde la Comunidad Islámica Imam Malik sostienen que hay “dos vertientes opuestas” en el uso del Islam y los musulmanes como “armas políticas”; por una parte señalan las ideas de extrema derecha “que utilizan en sus discursos el miedo al Islam y a los musulmanes para así conseguir esos votos […] hablan del Islam como si fuera una creencia violenta, y a su vez hacen ver que los musulmanes somos todos unos violentos; ellos son los salvadores que vienen a proteger a los españoles de las hordas musulmanas”, desde la Comunidad recuerdan que este mensaje es muy peligroso porque “incita al odio” y “genera conflictos”. La otra vertiente, sostienen desde esta agrupación religiosa, la componen los discursos que alimentan los extremismos y los fundamentalismos, “pero a estos señores no les importa lo que pueda pasar al introducir este tipo de mensajes en el escenario político, ni les importa ofender las creencias religiosas de millones de musulmanes en el mundo, a ellos lo único que les importa es conseguir votos a través del Islam y los musulmanes”, insisten.
La asociación duda del constitucionalismo de las personas que alimentan estos mensajes, e insiste en criticar que ciertos personajes políticos de la extrema derecha sostengan su condición de demócratas a la vez que apoyan dictaduras laicas en los países árabes; “dicen que son los únicos que separan la Religión del Estado y sin embargo no paran de atacar al Islam y a los musulmanes reivindicando su cristiandad y las raices de una España cristiana”, recuerdan.
La Asociación también critica a los partidos que “dicen defender a capa y espada al Islam y a los musulmanes, llegando incluso a pensar que la comunidad musulmana les pertenece”; consideran que, al igual que los anteriores, “tampoco tienen ningún tipo de escrúpulo” a la hora de utilizar e interpretar a su manera el Corán para poder conseguir sus objetivos, “tampoco tienen ningún tipo de reparo a la hora de manipular a los eruditos del Islam para conseguir un veredicto jurídico que apoye sus teorías políticas”.
Aunque consideran que ambas vertientes, ideológicamente, “están tan separadas como el cielo y la tierra”, sostienen que ambas coinciden en utilizar la religión a su antojo. De los partidos de izquierda, la Asociación Imam Malik critica la “hipocresía en estado puro” de que se autocalifiquen como laicos al mismo tiempo que sus campañas electorales “se realizan sin ningún tipo de pudor dentro de mezquitas y a través de charlas, conferencias y veredictos religiosos organizados por asociaciones y entidades islámicas”.
La Asociación insta a la ciudadanía a “no dejarse engañar”, y recuerdan que España es un país aconfesional, y por ende no hay partidos musulmanes”, sino partidos de derechas, de centro o de izquierdas “cuyos miembros son de confesión musulmana”; “también hay partidos con mayoría cristiana y nadie se atreve a decir que sean partidos cristianos”.
Del mismo modo Imam Malik insta a los musulmanes de Melilla a votar en libertad y a no dejarse utilizar como moneda de cambio, y advierten de que estarán “vigilantes” para, con las herramientas proporcionadas por el Estado de Derecho, “combatir a todos aquellos que intenten utilizar al Islam y los musulmanes para conseguir rédito electoral”
Nosotros no estamos en contra de ningún partido político, lo único que hacemos es combatir con las herramientas que nos da el estado de derecho a todos aquellos que intente utilizar al Islam y a los musulmanes para conseguir su rédito electoral, así como a quienes pretendan “comprar voluntades” aprovechándose de las necesidades de la comunidad musulmana.
