El mes de diciembre fue aciago para las rotondas de Melilla, cuando tres vehículos chocaron contra otras tantas rotondas en menos de una semana, los tres con resultado positivo en los test de alcoholemia a los que fueron sometidos por la Policía Local. El inicio del mes de enero estaba siendo tranquilo en este sentido pero en las postrimerías de este periodo ha vuelto a caer una rotonda. Fue la noche del viernes cuando un vehículo se empotró contra una de las redondas que hay situadas en el carretera del aeropuerto. En esta ocasión, a diferencia de lo que ocurrió durante los sucesos del mes de diciembre, el conductor no dio positivo en los test de alcoholemia y drogadicción y tampoco hubo heridos.
Sin embargo, el incidente ha vuelto a provocar el debate sobre la forma de conducir en Melilla, sobre todo en los que se refiere a los impactos contra las rotondas.
No hay que olvidar que hasta el presidente de la Ciudad Autónoma de Melilla, Juan José Imbroda, recordó que no se debe conducir bajo los efectos del alcohol después de que proliferaran este tipo de colisiones. Llegó incluso a tirar de ironía para que nadie culpara a estas construcciones: “Las rotondas no se mueven” dijo. Ahora vuelve a suceder pero por fortuna no hubo que lamentar lesionados.
