El C.F. Rusadir, después de perder el pasado sábado ante la Gimnástica de Ceuta (3-2), continúa a siete puntos de la salvación, si bien ha descendido una posición en la tabla, tras el triunfo de la U.D. Tomares ante el Séneca, a domicilio (1-2), que deja a los córdobeses como farolillo rojo. El conjunto rojinegro, que no mereció perder el derbi norteafricano, deberá hacer de La Espiguera un auténtico fortín hasta el final de la temporada y, a ser posible, lograr algo positivo en sus desplazamientos si quiere tener posibilidades de alcanzar el objetivo marcado a principios de la temporada, la permanencia.
El próximo escollo de los de Hakim Mohamed será la U.D. Almería.
En cuanto a la jornada, cabe destacar que los tres primeros clasificados lograron saca sus respectivos compromisos con victorias, por lo que la tabla no sufre cambios en esos puestos.
