El equipo melillense que dirige Ali Mohamed volvió a cerrar, una jornada más, su compromiso con una derrota, aunque dando la cara ante un equipo como el Maracena, uno de los firmes candidatos al ascenso a la División de Honor. La escuadra de la Ciudad Autónoma, a pesar ostentar el farolillo rojo de la clasificación del Grupo XIII de la Liga Nacional Juvenil, con cuatro puntos, sigue trabajando para intentar mejorar, pues si bien la salvación se antoja casi imposible, el objetivo es dejar una buena imagen.