El presidente del Gobierno de Melilla y del PP regional, Juan José Imbroda, denunció ayer la supresión en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2019 de la partida económica que las Ciudades Autónomas de Melilla y Ceuta llevan años recibiendo para atender a menores extranjeros no acompañados (MENA). En rueda de prensa, Imbroda recordó que en los PGE de 2018, actualmente vigente, hay casi 6,5 millones de euros contemplados en el programa 931H del Ministerio de Empleo y Seguridad Social para atender a menas en Ceuta y Melilla. De estos fondos, algo más de 4,1 correspondían a Melilla y el resto a Ceuta, si bien esta partida no aparece en los PGE de 2019 pese a ser “un derecho adquirido” de ambas Ciudades Autónomas por estar reflejados en cada ejercicio económico “desde hace muchos años” como ayuda estatal al enorme gasto que supone la atención a los MENA.
En el caso de Melilla, Imbroda recordó que este gasto se eleva a 16 millones de euros, de ahí que su preocupación ante lo ocurrido en los PGE de 2019, donde solo aparece “una partida globalizada de 30 millones de euros” cuyo destino desconoce el presidente melillense.
Al hilo, mostró su “cierto miedo” a “partidas saco” como la que aparece en los PGE de 2019 para MENA, ya que la llegada del dinero a Melilla “dependerá de a quién lo reparta y cómo” el Gobierno de Pedro Sánchez. Por eso, insistió en la necesidad de restablecer la partida que había específica para Melilla y Ceuta, ciudades que aún no han obtenido respuesta una respuesta “solvente ni insolvente de las que acostumbra este Gobierno”, dijo.
El esfuerzo de la Ciudad
Imbroda recordó que Melilla es una de las ciudades donde más se sufre el problema de los MENA en toda España, y puso en valor el esfuerzo que la Ciudad Autónoma realiza para atender a este colectivo pese a tener en sus centros de acogida a más de 900 niños y adolescentes.
“Se hace muchísimo por los menores aquí”, dejó claro el presidente melillense antes de admitir la saturación de los centros de acogida, donde hay hasta “literas de cuatro” instaladas para dar cabida a todos. No obstante, considera en que prefiere eso a que estos menores “estén en la calle esnifando pegamento” y corriendo serios peligros para intentar colarse en los barcos que conectan Melilla con la península.
En los centros de acogida, insistió Imbroda, se ofrece alimentación, ropa y cama a estos menores, que también están “más controlados”.
Al hilo, instó a los melillenses a que “no den ayuda” a estos chicos de la calle para que sigan en la misma situación, ya que la Ciudad Autónoma ya se encarga de dispensarles “ayuda oficial” e “intentar sacar de las calles” a los que se niegan a estar acogidos en los centros mediante el programa de educadores de calle, de cuyos resultados sacó pecho ayer públicamente.
