El Gobierno central se hará cargo de la explotación de la planta desalinizadora de agua de Melilla hasta que finalice su ampliación con la construcción del cuarto módulo. En una nota de prensa, la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad a la población melillense y desmentir las afirmaciones del consejero de Medio Ambiente, Manuel Ángel Quevedo, “que incluso llego a afirmar que la ciudad podría quedarse sin agua”. “Quevedo sabe perfectamente que no es así, la cercanía con dos citas electorales y sus intereses partidistas no son, ni pueden ser excusa para engañar ni alarmar a la ciudadanía”, ha dejado claro Sabrina Moh.
La delegada ha señalado que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (GHG) tiene firmado un convenio con la Ciudad Autónoma, por el cual se hace entrega de la desaladora a la Administración local en junio de este año, pero el Estado se va a hacer cargo de la infraestructura hasta la finalización del cuarto módulo.
“Quevedo conoce perfectamente que la Administración central, a través de la CHG, está trabajando en un pliego para explotar la desaladora durante ocho meses, ampliable otros ocho meses, periodo en el se sacará la contratación de la construcción del 4º módulo”, ha subrayado.
“La CHG se hará cargo de la explotación hasta que se inicie la construcción y mientras dure el periodo de ampliación”, ha explicado Moh.
La delegada ha señalado que este “pliego puente” cubre hasta 16 meses con lo cual se cubre la finalización del proyecto de construcción, y una vez finalizado, se daría paso a los 24 meses del plazo de construcción del cuarto módulo y a los 6 meses de puesta en marcha de la explotación, que también están previstos.
Una vez terminado todo ese periodo, la infraestructura pasaría a la Ciudad Autónoma, según Moh, que ha anunciado que la CHG está elaborando un proyecto de mejora de la red de abastecimiento para evitar pérdidas de agua, un problema que “Quevedo critica y que es una gestión directa del Gobierno local”.
Obra de emergencia
Asimismo, para que no se repitan sucesos como los ocurridos en el último temporal, la delegada ha anunciado que el Gobierno va a realizar una obra de emergencia para mejorar la desaladora con la excavación de pozos mediante los que se extraería el agua de mar ya filtrada.
Por otra parte se hará una modificación para reutilizar del agua de rechazo para limpiar los filtros, ha añadido.
Por último, la delegada ha negado que se haya perdido “un año” para contar en el grifo con agua 100 % mineral, como ha señalado Quevedo, sino que “se han perdido 7 años”, en referencia a los años de gobierno de Mariano Rajoy.
“Para junio de 2019 la desaladora debería haber sido una realidad, por eso esa era la fecha en la que estaba previsto que la Ciudad Autónoma se hiciera cargo de la misma”, ha explicado.
“El Gobierno de Zapatero dejó todo listo para que se empezara la construcción del cuarto módulo de la desaladora y el Gobierno del PP no ha hecho nada durante sus años de Gobierno, por lo que, no entendemos ese afán por alarmar a la población”, ha concluido.
