La Asamblea de Melilla esperará a la celebración de las elecciones generales y autonómicas y la toma de posesión de los nuevos gobiernos de España y de la Ciudad Autónoma para abordar el debate sobre la conveniencia o no de que Melilla entre en la Unión Aduanera. El vicepresidente primero del Ejecutivo de Melilla, Daniel Conesa, recordó que el Gobierno de España es “el actor fundamental” para que se pueda materializar ese cambio de estatus si, finalmente, se decide dar ese paso, habida cuenta que “tiene que tener claro y apoyar sin fisuras la postura que de aquí salga”.
“Si no, no hacemos nada”, señaló Conesa, en cuya opinión sería necesario, también, esperar a la constitución de la Asamblea en la próxima legislatura y la toma de posesión del nuevo Gobierno de Melilla para abordar este debate.
Esto podría llevarse a cabo, según el número dos del Ejecutivo actual, creando una comisión especial que tome como base del debate el estudio que ha encargado la sociedad pública Promesa sobre la conveniencia o no de la integración de Melilla en la Unión Aduanera, cuyas conclusiones dieron a conocer en un acto esta semana los técnicos que lo han elaborado.
Mantener el estatus actual
Según este estudio, lo más conveniente para Melilla es mantener su estatus actual fuera de la Unión Aduanera y trabajar a corto, medio y largo plazo en los próximos dos o tres años en la reforma y mejora de los procedimientos aduaneros, fiscales y administrativos para que determinadas compras no se conviertan “en una tortura” como sucede ahora.
En concreto, resolver los obstáculos que se dan en los trámites aduaneros, normas tributarias y la estructura del IPSI para “no matar moscas a cañonazos”, que fue una de las recomendaciones que plantearon los autores de este estudio, que para Conesa debe ser “un punto de partida imprescindible para la adopción de cualquier decisión política”.
Conesa destacó la importancia de este estudio, que está ya a disposición de todo el mundo, porque “es el más claro y contundente” de cuantos se han elaborado hasta el momento, y que contiene “conclusiones técnicas basadas en datos objetivos”, lo que “se contrapone a la postura política” de algunos partidos en este asunto.
Postura unánime
Según el vicepresidente de la Ciudad Autónoma, ahora corresponde a políticos, empresarios, agentes sociales y a la sociedad en general ponerse de acuerdo en este debate “cauteloso”, ya que “es imprescindible que haya una postura unánime” al ser “un tema crucial e importante para el futuro” de la ciudad.
Conesa, como presidente de Promesa, se mostró muy satisfecho por la elaboración de este estudio, y afirmó que esta sociedad pública está a disposición de todo aquel que quiera consultarlo y hacer sugerencias para avanzar en esa línea.
Entrar en la Unión Aduanera, “algo inalcanzable, pero no imposible”
El vicepresidente de la Ciudad Autónoma, Daniel Conesa, expresó su propio punto de vista al considerar que la integración de Melilla en la Unión Aduanera le parece “algo inalcanzable, pero no imposible”, habida cuenta que sería “un proceso largo y complejo” y que requiere la unanimidad de todos los países miembros de la Unión Aduanera, al implicar un cambio en el tratado de adhesión de España y determinadas normas tributarias europeas.
Además, advirtió de las “consecuencias graves” que podría tener para Melilla la entrada en la Unión Aduanera o llevar a cabo una participación en la aplicación del IVA convirtiendo las dos zonas aduaneras en un mismo territorio, ya que podría dar lugar a una subida de la inflación por la mayor tributación que habría en Melilla, una menor renta de los ciudadanos para el consumo y menos recaudación en impuestos.
Expresó la postura del PP, que considera que lo mejor es atender las recomendaciones del estudio, las cuales no son incompatibles con un cambio en un futuro, si bien en el momento actual cree que lo mejor es mantenerse fuera de la Unión Aduanera y mejorar los procedimientos.
