La música se adueñó de un centro de culto como la Iglesia de la Castrense y de qué manera. A través de un espectacular concierto de “música sacra” ofrecido por la Orquesta de Cuerdas del Conservatorio Profesional de Música de Melilla, bajo la dirección de Elia Domínguez. Los asistentes tuvieron la fortuna de oír una magnífica interpretación de piezas como Cantata BWV 147, “Jesús, Alegría de los Hombres”, J.S.Bach; Sinfonía en Si m. “AL Santo Sepulcro”, A. Vivaldi; Arioso, J.S. Bach; Panis Angelicus, C. Franck; Air, Suite nº3, J. S. Bach; Ave María, J. Caccini y Ave Verum, KV 618, W.A. Mozart.
El evento cultural, que ha tenido lugar con motivo del XXX de la Cofradía de la Castrense de Nuestro Padre Jesús Humillado y María Santísima de la Piedad, fue protagonizado por un conjunto musical formado por todos los alumnos de cuerda de las Enseñanzas Profesionales del Conservatorio Profesional de Música de Melilla, en concreto 40 estudiantes de violín, viola, y violonchelo que tienen entre 12 y 17 años. La Orquesta de Cuerda del Conservatorio, además de tocar en las audiciones y conciertos programados por el Conservatorio, colabora desde hace cuatro años en el día mundial de los Museos.
