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BALONCESTO - LEB ORO

Pésimo partido del Melilla Baloncesto en tierras mallorquinas

Agada fue el máximo anotador del partido, con 22 puntos
(Autor: Guerrero)

El Melilla Baloncesto sumó su segunda derrota consecutiva, en un encuentro en el que a los de Alejandro Alcoba les faltó intensidad. Sólo en el último cuarto, con el partido ya decidido, los melillenses apretaron para maquillar un resultado escandaloso e intentar salvar el average particular, pero aunque estuvieron a punto de lograrlo, ni siquiera eso lograron. El decano salió dormido a la cancha de Son Moix. Los de Alejandro Alcoba tenían muchos problemas para sacudirse la presión local, perdían demasiados balones y, sobre todo, fallaban muchos lanzamientos. Y así, espesos y atascados, los norteafricanos vieron como su rival iba abriendo brecha en el luminoso, hasta irse de 13 puntos antes de que los melillenses consiguiesen abrir su marcador (13-0, 5’).
Cinco minutos y medio tardaron los de la Ciudad Autónoma en conseguir sus primeros puntos, gracias a un triple de Agada. El nigeriano volvió a ver aro poco después, aunque la zaga local tardó poco en conseguir tapar sus internadas y la luz de Melilla volvió a apagarse (17-5, 8’). Solo en la recta final del primer cuarto consiguió empezar a funcionar, con un triple de Gilling y dos puntos más de Agada, que dejaron el marcador en 19-10 al final del primer cuarto.
La dinámica del partido no cambió en el segundo acto. El Melilla Baloncesto siguió teniendo muchos problemas bajo el aro contrario. Mientras, el Iberojet Palma, con un buen trabajo defensivo y asegurando sus lanzamientos, logró mantener su renta en torno a los 10 puntos (31-18, 15’). Los locales movieron bien el balón e hicieron inútiles los cambios de defensa de un Melilla que no logró encontrar su sitio y que, a 3’16” para el descanso perdía de 18 puntos (38-20). Y como ya sucediese en el primer cuarto, en la recta final, el decano volvió a mostrar su mejor cara y, con dos triples de Vucetic y cuatro tiros libres convertidos por Agada consiguió reducir las diferencias hasta los 13 puntos, para llegar al descanso con 43-30.
La segunda mitad comenzó tan mal para los de Alcoba como lo habían hecho en la primera, con un equipo completamente perdido, que no mostró intensidad en defensa y que tampoco consiguió jugar en ataque. El Melilla Baloncesto no había saltado a la pista tras el descanso y los mallorquines lo aprovecharon para elevar su renta hasta los 23 puntos en apenas tres minutos y medio (53-30). Mientras, Alejandro Alcoba se desesperaba y paró el partido en busca de soluciones. No sirvió de mucho. A su equipo le faltaba intensidad en todas las líneas y la ventaja local alcanzó los 26 puntos, justo a la vuelta del tiempo muerto (56-30).
Los primeros puntos del decano en este cuarto llegaron de la mano de Balaban, tras cuatro minutos de sequía, pero no despertó. Cierto es que a partir de ahí, los norteafricanos lograron, al menos, frenar la sangría de puntos de su rival e incluso anotar cuatro más de la mano de Franch y Agada, pero apenas redujeron las diferencias ante un Iberojet Palma que durmió el partido para intentar defender su ventaja (63-36, 28’). De ahí al final del cuarto, un breve intercambio de canastas dejó el luminoso en 65-39.
El partido estaba decidido, aunque el Melilla Baloncesto trató, por todos los medios, de maquillar el resultado final en los últimos diez minutos. Llegaron a ponerse a 14 puntos los de Alejandro Alcoba a falta de 1´20 para la conclusión (77-63), pero el Iberojet Palma cerró bien en defensa en esos últimos compases y la tímida reacción melillense se quedó en eso.

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Enrique Azaustre

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