Los alumnos del Colegio Reyes católicos endulzaron la mañana con una particular torrijada, en la que profesores como estudiantes disfrutaron de una jornada en la que la premisa más importante era compartir.
Esta acción la llevó a cabo el Departamento de Religión del centro, teniendo a Alberto Vera Acosta como coordinador del proyecto. La torrijada está relacionada con la Cuaresma, es por ello por lo que los alumnos de Religión Católica se encargan de traer al centro los típicos dulces de esta época, como las torrijas, los roquillos o los borrachuelos. En cambio, los alumnos de Islámica aportan las bebidas.
“La idea es que los alumnos aprendan de todas las culturas y religiones, porque todos somos iguales. Además, con esta actividad estamos incentivando a los alumnos a aprender a compartir y colaborar”, explica Vera. “Al final queda muchísima comida, que posteriormente la donamos a centros como la Divina Infantita”, alegó el profesor. “Intentamos realizar esta torrijada a finales del segundo trimestre, también porque se terminan las evaluaciones y como modo de ocio”, finalizó Alberto Vera.