La plantilla del BM. Virgen de la Victoria sólo se ejercitará esta semana durante dos días de entrenamientos, ya que este próximo fin de semana descansará por el parón liguero de la festividad de la Semana Santa, aunque será a partir del próximo lunes cuando entrene con total normalidad de cara a preparar la doble cita liguera que disputará en el Pabellón Municipal Lázaro Fernández el viernes 26 de abril (19’00 horas), ante el Club Balonmano Villafranca, y el domingo 28 (13’00 horas) en Benalmádena. Faisal Salmi, entrenador del BM. Virgen de la Victoria, indicó que el único objetivo que tiene ahora su equipo, tras lograr la permanencia matemática hace ya bastantes jornadas, “es terminar lo mejor posible el campeonato para escalar varias posiciones más en la clasificación” en las tres últimas jornadas, “pero sobre todo queremos terminar con buenas sensaciones y satisfecho del trabajo que hemos realizado”.
Sin embargo, para esta recta final de Liga no podrá contar con David Álvarez, por motivos personales, y con Carlos González, lesionado, “aunque Salva Baena puede hacerlo bastante bien en ataque, tal y como lo ha hecho en otras ocasiones”.
Por otro lado, el técnico melillense analizó el buen partido de sus jugadores, pese a la derrota (17-22) ante el Cajasur Córdoba, que se proclamó campeón de Liga en el Pabellón Municipal Lázaro Fernández. “Hemos demostrado, una vez más, que somos un equipo muy competitivo ante los rivales de la zona alta. La primera parte fue muy buena, sobre todo en el aspecto defensivo y en la portería, aunque en ataque pudimos estar mejor en la finalización, además de fallar dos lanzamientos de siete metros, pero el Cajasur cuenta con un gran portero, de otra categoría”.
Faisal Salmi destacó también el buen segundo tiempo del equipo, aunque reconoció que la actuación arbitral terminó por desquiciar a sus jugadores ante el campeón de Liga. “El segundo también fue igualado, con alternativas en el marcador, pero al final entramos un poco en la dinámica del arbitraje, nos desquiciamos bastante y se nos fue un poco la cabeza, ya que deberíamos haber estado más centrados en nuestro trabajo, y además Yunes cometió un error de golpear el balón contra el suelo y fue excluido por dos minutos, con lo que conlleva eso de quedarte con un jugador menos y además sin portero”.
“Lamentablemente, los árbitros no estuvieron acertados al final, y se ha demostrado una vez más lo que llevo diciendo toda la temporada, que si hubiésemos tenido dos o tres jugadores para hacer cambios se habría ganado el partido, pero además necesitamos tres cancerberos, ya que no hemos podido contar con normalidad con David Enríquez por lesión, aunque nos ha ayudado bastante cuando ha estado bien, y en varios desplazamientos no hemos podido contar con él”, se lamentó el técnico melillense.
En este sentido, añadió que “estamos jugando con un solo portero y eso es muy peligroso”, pues pueden pasar cosas como las del pasado sábado, que Yunes “cometió un error bastante infantil y tuvimos que poner a un jugador de pista en la portería”.
“Necesitábamos contar también con algún jugador más, y en esta ocasión no pudimos contar con efectivos del equipo juvenil, que el pasado fin de semana disputó el Campeonato de España. Apenas teníamos recambios, solamente Carlos González, que estaba en el banquillo, pero lesionado, y jugamos todo el partido prácticamente con los mismos jugadores. Sólo teníamos el recambio de un extremo y un pivote. Se habla bastante de ese salto de calidad que necesita el equipo para próximas temporadas y es fundamental contar con varios jugadores para los diferentes puestos”, concluyó el entrenador del BM. Virgen de la Victoria.
