La 32ª jornada de LEB Oro cerró la ‘sangría’ de partidos perdidos por el Club Melilla Baloncesto, ganando este sábado pasado en el Pabellón Javier Imbroda al Cáceres por 78-76. El decano comenzó el choque con un ritmo muy alto en defensa y ataque, desarbolando al plantel cacereño, ganando 35-26 al descanso. En la reanudación se invirtieron las tornas, ganando los locales casi al final. El conjunto dirigido por Alejandro Alcoba venció este sábado pasado, en el Pabellón Javier Imbroda, al Cáceres Patrimonio de la Humanidad por 78-76, logrando finiquitar una crisis de cuatro derrotas consecutivas que amenazaba con alejarlo de los Play-Offs.
El decano entró al partido con un ritmo trepidante tanto en ataque como en defensa, pillando a los cacereños desprevenidos y cerrando el primer cuarto con ventaja (19-14). En el segundo volvió a ejercer su dominio a través de Vucetic y Zyle, quienes dominaron el poste bajo, llegando al descanso con una ventaja de 9 puntos (35-26).
A partir del tercer cuarto se invirtieron los ‘papeles’. El Cáceres modificó su ‘dibujo’ táctico y colocó a Trist como pivote, dejando a la defensa melillense descolocada y cerrando el parcial con máxima empatados a 19 puntos (54-45). En el último cuarto, la defensa de azulón hizo ‘aguas’ por todas partes, salvando el plantel el duelo prácticamente en los instantes finales, gracias al acierto anotador y la renta del primer periodo.
Pese a la victoria, el club desciende a la séptima plaza de la clasificación, y deberá ganar todo si quiere certificar los Play-Offs.
