El IES Leopoldo Queipo acogió ayer una exposición de diferentes proyectos de alumnos que cursan 4º de Secundaria, de tres centros diferentes, entre los que se encontraban el IES Miguel Fernández y el IES Juan Antoni Fernández, además de contar con la presencia y los trabajos del IES Leopoldo Queipo, que fue el que cedió su biblioteca para este evento educativo, dentro del programa ‘Pensamiento Computacional’. Los estudiantes mostraron la mezcla entre ingenio y robótica simple. Imaginar un futuro es imaginar un mundo lleno de robots y de altas tecnologías que hacen de la vida de las personas más sencillas, o tal ves es solo fruto de la ficción cinematográfica. Lo que sí es cierto es la capacidad de algunos alumnos melillenses de crear estas máquinas capaces de hacer cosas, cuánto menos, curiosas.
Ayer, alrededor de una veintena de alumnos de varios institutos locales, mostraron coches que seguían a través de sensores líneas negras, detectores de calor que podrían servir para alertar acerca de un incendio, bolas robotizadas que recorren un circuito solo o incluso un pequeño personaje al que tocándole su diminuto corazón empieza a moverse.
Esto son solo ejemplos de lo que han ido trabajando los estudiantes, durante tres meses, en algunas de sus asignaturas, como es Tecnología y un grupo de Formación Profesional de Informática.
Para la creación de estas pequeñas máquinas robóticas, los alumnos tuvieron que trabajar a través de Arduino, que además del material necesario, es una base para programar a través de ella las diferentes acciones que debe de hacer el proyecto creado.
Proyecto computacional
El director provincial de Educación, Juan Ángel Berbel, aseguró que “dentro del programa ‘Pensamiento Computacional’, el grado de dificultad varía en cuanto a la adaptación curricular que hayan tenido estos estudiantes dentro de las aulas o módulos. Eso sí, hay que valorar la buena predisposición que han tenido todos los alumnos y profesores, por incluir en sus curriculums educativos valores como los de la robótica”.
Por otro lado, José Cerdán, asesor de la Unidad de Programas, explica que “con Arduino se puede trabajar en distintos grados de la enseñanza, desde Bachiller hasta en Primaria, que de hecho, en Melilla hay alumnos de 5º, de algunos de los centros de aquí que ya lo están llevando a cabo, eso sí, con una robótica y programación muy básica. El fin principal es hacer del aula un lugar más tecnológico y aprender a través de eso”.
