El presidente de la Ciudad Autónoma, Eduardo de Castro, recibió ayer en su despacho a Dolores García Ruiz, elegida melillense del año por la Federación de Casas Regionales de Melilla que se encuentran en la ciudad durante este fin de semana. Sobre este premio, indicó que para ella es un “honor inmenso” y aunque ha tenido galardones, aseguró que este “es el que con más orgullo voy a llevar toda mi vida”. Además, la escritora contó que le regaló a De Castro su novela ‘La reina del azúcar’, con la que va “abriendo camino” para que la gente conozca Melilla y vengan a descubrirla y el presidente de la Ciudad quiso obsequiarla con un libro sobre el levantamiento del sitio. La escritora melillense Dolores García explicó a este Diario que la reunión con el presidente de la Ciudad fue “muy grata” y también “muy reconfortante”. Además, indicó que le llena de “esperanza e ilusión” de que Melilla “empiece a desplegar alas y que continúe todo lo positivo que ha habido hasta ahora”.
“Que la ciudad siga teniendo un reconocimiento a todos los niveles, el que se merece, porque es mi lucha particular como melillense, como tantos que están fuera de Melilla, es dar a conocer nuestra tierra natal”, dejó claro.
En este sentido, García destacó que una vez que se conoce Melilla, “te enamoras de ella y nuestra misión como melillenses es ser altavoces de nuestra tierra”.
Melillense del año
También, quiso resaltar la labor “impagable” de las casas regionales de Melilla en la Península ya que son “pequeñas embajadas de la ciudad” para que la gente conozca la Ciudad Autónoma. Aunque, cree que “tenemos que hacer mucho más”.
Sobre cómo se enteró de que había sido elegida melillense del año, la escritora señaló que el secretario de la Federación se puso en contacto con ella y le dio la noticia. La anécdota, contó es que tuvo que decirle que le repitiera lo que le había dicho porque se quedó “sorprendida”.
“Es un honor enorme, inmenso, he tenido galardones, pero que tus propios paisanos te reconozcan y te distingan es el más emotivo y con el que más orgullo voy a llevar toda mi vida”, afirmó.
Asimismo, expuso que le había regalado al presidente el libro ‘La reina del azúcar’ para que la gente descubra Melilla y le “entren ganas” de conocerla. De Castro, por su parte, tuvo “la gentileza” de obsequiarla con un libro sobre el levantamiento del sitio.
Respecto a si tiene pensando hacer una segunda parte de la novela, García respondió que “en principio no”, aunque sostuvo que “nunca se puede decir que no se pueda continuar porque es una historia que da mucho de sí y Melilla tiene todas las partes que quiera para poder desarrollarla”.
Descubrir Melilla a través de ‘La reina del azúcar’
Dolores García contó que ‘La reina del azúcar’ se sitúa a principios del siglo XX cuando justamente la Melilla antigua empieza a desarrollarse como la Melilla modernista y el arquitecto Enrique Nieto está levantando los edificios principales. En la novela, explicó que llega una joven con su familia desde París y aunque venían para un breve periodo de tiempo, la vida se complica y ella va a tener que hacerse cargo de su familia y partir de cero. Además, sostuvo que levantará en la ciudad una industria del azúcar y con muchas dificultades va a tener oportunidad de vivir una serie de amores.
La escritora manifestó que el libro es “una excusa” para que la gente conozca como se fue creando Melilla, “el carácter emprendedor de los melillenses y de resistentes a todas las dificultades y cómo, aunque te vengas abajo, te vuelves a levantar y a brillar”.
En la novela, resaltó que la mujer se va convirtiendo en “casi un emblema, un símbolo de la ciudad” y entonces, “se da cuenta de que ella es la propia Melilla, se ha hecho a sí misma y ha podido superar las dificultades y crear todo un imperio del azúcar”.
