La A.V. El Tesorillo es una de las “más antiguas de la Ciudad”, teniendo a más de 300 usuarios de todos lo barrios, lo que hace de ella, “una gran familia”. La presidenta de la entidad, Juana Miras, explica las diferentes actividades que organizan y detalla las acciones que se harán este año con motivo de su patrona. Por otro lado, Miras destaca que “en nuestro barrio, por ahora, no hay problemas y existe una buena convivencia entre los vecinos”.
El barrio de El Tesorillo cuenta con una de las asociaciones de vecinos “más antiguas” de toda la Ciudad, tanto es así que algunos de los miembros detallan que “este lugar ha sido de toda la vida, no recuerdo vivir aquí sin tener la asociación al lado”.
Más de 300 usuarios componen esta “gran familia” que no rechaza a ningún melillense; de hecho, la presidenta de la asociación, Juana Miras, indica que “aquí hay usuarios de todos los barrios de la Ciudad, no solo del nuestro, y no cerramos puertas al que quiera formar parte de esta entidad”.
Según cuentan, esta sociedad vecinal comenzó allá por 1981, cuando aún existía un casino por barrio y del que salió la primera directiva y la iniciativa de agruparse los vecinos en una asociación. “Alrededor de los 80 fue cuando empezó la moda de las asociaciones de vecinos a aumentar y entonces se creó esta”, comenta Miras.
La responsable de la asociación comienza a relatar su andadura por la dirección de la AV. Tesorillo, “mi marido y yo llevamos toda la vida metidos en la asociación de vecinos, desde el 81, participando en todas las actividades que se proponías y apoyando las iniciativas, pero en 2016 me metí en la directiva, como vicepresidenta, aunque hace ya casi dos años que ocupo el puesto de presidenta, después de que el antiguo responsable dejase su puesto y en la asamblea me propusieran”.
Un asociación activa
Miras cuenta que “en la asociación no paramos ni un momento”. Razón no le falta cuando empieza a detallar todas las actividades y acciones que se preparan y ejecutan desde la entidad.
“Ahora estamos con un taller de mosaicos; pero, hace un par de semanas, acabamos con el de Sevillanas y, anteriormente, con el de vidrieras”, detalla la presidenta. “En la actualidad, estamos preparando las actividades relacionadas con nuestra patrona y ya los próximos cursos que van desde finales de septiembre hasta diciembre, más o menos”, agregó.
Cocina, baile de salón, competiciones de parchís y dominó, etc., son algunas de las muchas actividades que están a la vuelta de la esquina, aunque ahora lo más importante es preparar “el día grande” de esta entidad vecinal, que sería el 15 de agosto.
Programa por la patrona
“Empezamos nuestro programa de actividades en honor a nuestra patrona el próximo 10 de agosto, con una comida en convivencia en el Melilla Puerto, a la que puede venir quién lo deseé; eso sí, los precios varían dependiendo de si eres o no miembro de la asociación”, detallas Miras.
En este sentido, el 13 de agosto, la fiesta continúa, pero en esta ocasión está enfocada, en gran parte, a los niños. “Cada año invitamos a una asociación, como Aspanies o Autismo Melilla, pero en esta ocasión aún no sabemos a quién vamos a invitar para esta edición”.
La responsable relata que esto es así porque “los miembros de la entidad somos ya mayores, nuestros hijos están casados y los más pequeños son los nietos, por eso invitamos a que vengan niños y jóvenes a disfrutar de este día”.
En este sentido, las fiestas finalizan el día 15, cuando se saca a procesionar a la virgen y se hacer una paellla para todo aquel que quiera acercarse a la asociación. “Esperamos que la gente venga, sabemos que coincide con la Feria de Málaga, pero es un día importante para todos nosotros”.
Sobre este día, Miras detalla que este año se incluye una novedad y es que, al parecer, la misa en la parroquia de San Francisco Javier, como la procesión, será en horario de mañana en lugar de por la tarde.
Un barrio sin problemas
La responsable de la asociación, con respecto a diferentes problemas que se pueden presentar en el barrio, se muestra rotunda al afirmar que “no tenemos ninguno, los que teníamos nos lo han solventado, por lo tanto ahora no hay nada que se pueda destacar negativamente”.
Al parecer, según relata, los dos únicos inconvenientes que han tenido recientemente han sido “una mal colocación de los contenedores de basura y una petición a la Ciudad Autónoma de que se realice un proyecto par un parque infantil, puesto que es el único barrio de la Ciudad que no dispone de uno”.
Miras detalla que en el proyecto para ese parque “ya está diseñado”. Según detalla, la plazoleta que hay frente a los campos de fútbol del Tesorillo acogerá un parque con columpios para los niños y un circuito de deporte urbano alrededor. La fuente, que está en el centro de este enclave del barrio, será trasladada “a otro punto que está aún por determinar”.
Miras presume que “nuestro barrio suele ser tranquilo y limpio, no hay problemas así destacables, quizás el aparcamiento, pero eso es cosa de toda la Ciudad”. De este modo, agrega “podemos decir que tenemos una buena convivencia entre todos los vecinos, el buzón de sugerencias y quejas siempre está vacio, que es una buena seña”.
“Gracias a esta asociación, los miembros del barrio nos conocemos y no somo simples vecinos que ni se saludan”
La asociación de vecinos del Tesorillo dispone de zonas comunes, como es un bar y una terraza, donde los miembros de esta “gran familia” melillense pasan sus tardes jugando al dominó o realizando los distintos cursos.
En la actualidad, se empieza a preparar las competiciones para la patrona, en este caso dominó es lo más escogido entre los hombres, entre los que se encuentran los más veteranos y fundadores de esta entidad. “Recuerdo cuando se formó esta asociación, a raíz del casino, y he pasado mi vida viniendo y participando, porque este asociación es un punto en común con todos los vecinos, es la que hace que nos conozcamos y saludemos todos los días y no seamos simples vecinos que no se dirigen la palabra”. Sin embargo, la presidenta insiste en que “se nota que falta gente joven y en cierta manera se debe a que los ritmos de vida de ahora, ya no son como los de antes”.
