El presidente de la Ciudad Autónoma, Mustafa Aberchán, anunciaba que no habría subida de sueldos para los nuevos miembros del Gobierno de la Ciudad. Todos ellos, incluido él mismo, cobrarían la misma nómina que habían percibido sus antecesores, es decir, alrededor de medio millón de pesetas el titular la Presidencia y unas 425.000 pesetas consejeros y viceconsejeros. Aberchán apuntaba también que se respetarían el mismo organigrama vigente. Los miembros de la oposición, por su parte, también pedían un sueldo para sus liberados.
El consejero de Recursos Humanos, el ex sindicalista Juan Carlos Cuadrado, pedía a CCOO, una reflexión acerca del porqué de su nombramiento. Apuntaba que podrían mejorarse las relaciones entre los sindicatos y la administración.
