Las supuestas diferencias que se intuían entre el coordinador territorial de Ciudadanos en Melilla, Eduardo de Castro, y el presidente nacional de su partido, Albert Rivera, han dado un paso más en la confirmación de la sospecha. No en vano, el presidente de la Ciudad Autónoma ha dejado entrever su rechazo a la actuación del líder naranja compartiendo y ensalzando en la red social Twitter un artículo de prensa donde se cuestiona el posicionamiento de Rivera frente a los críticos en el partido, entre ellos su ex número dos, Francisco de la Torre, que dimitió del Comité Ejecutivo Nacional de Ciudadanos hace apenas 10 días.
De Castro publicó el jueves por la tarde un tuit para compartir un artículo de opinión publicado en el periódico digital eldiario.es, titulado “El valor y los valores de Francisco de la Torre”, cuyo autor es Ricardo Rodríguez, técnico de Hacienda y escritor, además de compañero del ya ex dirigente de Cs.
Según el tuit del presidente melillense, se trata de una “excelente opinión”, afirmación que afianzó con un “Me gusta” a otro comentario en la misma red social, publicado por el propio Francisco de la Torre, en el que se mostraba “agradecido a Ricardo Rodríguez por este artículo que habla sobre mí”.
En dicho artículo, además de halagos para De la Torre, el autor rechaza el viraje de Cs hacia la derecha y señala muy directamente a Albert Rivera, al que critica por su “desmesura verbal y crecientemente demagógica de la que viene haciendo gala en los últimos tiempos”.
Algunos de los pasajes
“La aportación de quien acumula la experiencia profesional y la formación de Francisco de la Torre posee un valor inapreciable. La dimisión de sus responsabilidades directivas y de representación en Ciudadanos coincide con otras conocidas fugas debidas a la desbocada derechización de este partido político. Desde luego, muy mal cuadra la racionalidad de los textos de Francisco de la Torre con la desmesura verbal y crecientemente demagógica de la que viene haciendo gala en los últimos tiempos Albert Rivera”, apunta el artículo compartido por De Castro.
“El caso de Ciudadanos es muy llamativo pero no el único. La tendencia de los aparatos de los partidos a amarrar fidelidades, ignorar o silenciar cualquier atisbo de disidencia, señalar y marginar a "traidores" y buscar el triunfo sobre la base de consignas simples carentes de matices arrincona la razón –de nuevo y como tantas veces a lo largo de nuestra historia– y expulsa a las personas que como Francisco de la Torre, desde diferentes ópticas políticas y fundándose en los más dispares idearios, pueden hacer aportaciones muy sustanciales al bien común. El populismo, por lo que se ve, impregna a bastantes más partidos que aquellos a los que de manera convencional se atribuye”, señala en otro párrafo dicho artículo.
Y finaliza así: “Si finalmente Francisco de la Torre se reincorpora a su trabajo en la Agencia Tributaria, sus compañeros y compañeras podremos felicitarnos por haber recuperado a un magnífico profesional y la ciudadanía por recobrar a un entregado servidor público. Pero todos habremos perdido la contribución, en la más alta instancia de representación democrática, de un conciudadano cargado de ideas de reforma, naturalmente siempre discutibles pero basadas en la razón y no en el prejuicio, ni en el odio, ni en las orejeras ideológicas”.
Otras muestras de sus diferencias con la cúpula naranja
Con su tuit, Eduardo de Castro podría estar escenificando sus diferencias con la cúpula nacional de Ciudadanos, que le ha obviado con claridad sin darle públicamente una muestra clara de apoyo pese a ser su primer presidente autonómico en España. De Castro, que, como él mismo dijo, consiguió “poner un punto naranja” en el mapa de las autonomías en nuestro país, no ha sido, siquiera, felicitado públicamente por su Cs desde su proclamación.
La única muestra de respaldo que ha conseguido De Castro por parte de Cs nacional ha sido que se desplazara hasta Melilla Miguel Gutiérrez, que ocupa el último puesto en el Comité Permanente de Cs como secretario del Grupo Parlamentario en el Congreso. Gutiérrez vino a Melilla para asistir al discurso de investidura de De Castro, el 21 y 22 de junio, y volvió el 4 de julio para la toma de posesión de los miembros del Gobierno. Pero Gutiérrez no hizo declaraciones a la prensa, a pesar de que en su primer viaje a Melilla se había anunciado inicialmente que sí las haría, si bien Cs cambió el plan y dijo que quien intervendría sería el propio De Castro. De esta forma, se dejó a los periodistas sin posibilidad de preguntar al dirigente nacional por la opinión del partido sobre el hecho de que De Castro se presentara como candidato a presidente teniendo solo un diputado, obteniendo el apoyo de PSOE y CPM, y desoyendo el acuerdo nacional de dejar que gobernara la lista más votada, que era el PP.
La portavoz del partido, Inés Arrimadas, dijo sobre este caso que en Cs estaban “recopilando información” de lo sucedido en los territorios donde ha sucedido algo “inesperado” en la constitución de los ayuntamientos, pero según De Castro, las palabras de la portavoz naranja se debían a que “en política hay que hacer declaraciones de ese tipo”.
Otras muestras del posible desencuentro entre De Castro y la cúpula nacional pueden ser la ausencia de dirigentes a la inauguración de la sede de Cs Melilla, que tuvo lugar este miércoles, y también el hecho de que Eduardo de Castro no haya sido incluido en la recién remodelada Ejecutiva de Ciudadanos pese a ser el primer presidente autonómico del partido. El único melillense que forma parte de dicha Ejecutiva no es De Castro, sino Javier Imbroda, que solo lleva un año en el partido y ostenta un cargo de mucha menor responsabilidad que la del presidente melillense, como es consejero de Educación y Deporte de la Junta de Andalucía.
