El radar instalado a principios de este año en la Carretera Alfonso XIII ‘cazó’ en la madrugada del lunes un vehículo Mercedes con matrícula de Marruecos circulando a 124 km/h cuando la velocidad máxima permitida en esa zona es de 30 km/h, por lo que cuadruplicaba dicho límite. La Policía Local localizó al día siguiente el vehículo estacionado en la vía pública y ayer denunció a su conductor por un delito contra la Seguridad Vial. Según informaron a MELILLA HOY fuentes de la Policía Local, este Cuerpo no pudo actuar en el momento en el que el coche circulaba por la Carretera Alfonso XIII como si fuera una autovía debido a que las imágenes de los radares fijos no le llegan de manera inmediata, sino que son analizadas y gestionadas al día siguiente por la Sección de Tráfico de la Policía Local.
Tras detectar el pasado martes dicha infracción, y debido a que el autor era un vehículo marroquí, la Policía Local lo puso en busca y captura para que fuera interceptado si era sorprendido circulando por la ciudad o pasando por la frontera. Esta orden permitió localizar el coche estacionado en la vía pública ese mismo día, por lo que la Policía Local procedió a llevárselo con la grúa para su depósito.
Su propietaria se personó esa misma tarde en la Jefatura y manifestó que el coche era suyo, pero no lo conducía ella. Por lo tanto, los agentes citaron tanto a la dueña del vehículo como al conductor ayer por la tarde.
Finalmente, ambos se presentaron en la Jefatura y la Policía Local ha denunciado a la persona que conducía el vehículo en calidad de investigado por un delito contra la Seguridad Vial.
