Los hombres de Alejandro Alcoba afrontaban ayer sábado su primera prueba de pretemporada, un partido en el que ya pudieron verse algunas pinceladas del estilo que quiere imponer esta temporada el técnico del Melilla Baloncesto a su equipo. Lo cierto es que los azulones ofrecieron buenas sensaciones ante el CAM Enrique Soler sobre la cancha del Pabellón Guillermo García Pezzi. El CAM Enrique Soler pareció empezar mejor el encuentro ante un Melilla Baloncesto que aún necesitaba conectar un poco, algo lógico teniendo en cuenta que era el primer partido que disputaba este bloque completamente nuevo de jugadores.
Ello se tradujo en varias pérdidas de balón consecutivas que hacían que los colegiales se marcharan 9-2 en el marcador. Entre tanto, Matulionis abandonaba el choque con molestias en un tobillo. Con el paso de los minutos de este primer cuarto, los de Alejandro Alcoba fueron creciendo con un Agada que ya ejercía de líder. Además, con la entrada de los hombres de banquillo, el decano subió enteros en defensa, controló el rebote y consiguió irse once puntos arriba (17-28) al final de los primeros diez minutos.
Los azulones arrancaban el segundo asalto con la buena dinámica con la que acabaron el primero, corriendo la pista y anotando en transición. De este modo, se situaban con un favorable 2-8 en el luminoso, tras poco más de dos minutos consumidos de este periodo. El equipo de Alcoba comenzó a estar menos acertado de cara al aro, a lo que se sumaban varios errores en primera línea, lo que permitió a los colegiales igualar el electrónico (10-10) alcanzado el ecuador del mismo. Con Agada de nuevo en la cancha, y con las rotaciones en el cuadro naranja, el decano puso una marcha más al partido que le sirvió para abrir otra vez brecha y acabar imponiéndose por 17-29.
En el tercer periodo se repitió lo vivido en el anterior, es decir, un Melilla Baloncesto que dominaba desde la defensa y que rápidamente rompía el cuarto con varios robos que ponían el 4-10 en el marcador. Asimismo, en esta segunda parte se notó la mayor profundidad de banquillo de los azulones y la semana más de preparación que acumulan los hombres de Alejandro Alcoba, de ahí el claro 16-31 con el que concluyeron estos terceros diez minutos.
El cansancio también terminaría haciendo mella en las filas del decano, quienes no contaban con las rotaciones de Luke y de Sidibé, además de la de Matulionis. Ello hizo el cuarto resultase mucho más igualado y se resolviese con triunfo colegial por un ajustado 14-15.
