Ayer se recepcionaron, por parte de la Ciudad Autónoma, las obras de reparación que se han llevado a cabo en las fachadas del edificio del antiguo mercado del Mantelete, en el que se ubica la Consejería de Infraestructuras y Urbanismo, anteriormente conocida como de Fomento. La adjudicataria de la obra ha sido la empresa Hernández y Arnedo, que han contado con un plazo de ejecución de tres meses y un presupuesto de 81.000 euros para llevarla a cabo. El técnico Jesús Fernández, explicó que se ha renovado la carpintería metálica y de madera del inmueble, cambiado la cerrajería, reparación de los pilares metálicos, reimpermeabilización y restitución de los módulos laterales, los revestimientos pétreos. “No se ha modificado ningún parámetro urbanístico de la Consejería, porque la mayoría de los trabajos han sido de reparaciones”, indicó.
La propia obsolescencia de los materiales utilizados en la construcción del inmueble, a comienzos del siglo XX y su posterior reacondicionamiento como espacio de oficinas a mediados de los años 90, hacían necesaria este “lavado de cara”, según indicó el consejero de Infraestructuras y Urbanismo, Rachid Bussian, acompañado por el presidente de la Ciudad, Eduardo de Castro, en la recepción de las obras ejecutadas sobre un inmueble con la calificación de bien cultural. Desde la Ciudad se felicitó a la empresa Construcciones Hernández y Arnedo por la actuación realizada. El plazo de ejecución ha sido de tres meses y el presupuesto de algo más de 81.000 euros.
Aseguró el consejero que el siguiente paso, como se abordó en el pleno del miércoles, se quiere llevar a cabo otras actuaciones en este inmueble enfocadas a la eficiencia energética. No será este el único edificio municipal en el que se llevarán a cabo trabajos de este calibre, sino que habrá otras actuaciones a cargo de inversiones financieras sostenibles, siguiendo incluso lo que marca la directiva europea.
Terreno para colegios
Por último, Bussian adelantó que se está pendiente de cerrar en Consejo de Gobierno destinar unos solares en Averroes y a espaldas del Enrique Soler para la construcción de nuevos centros docentes, e indicó que aún no se ha cerrado el proceso para buscar la ubicación de un tercer centro docente, que poder ofrecer al Ministerio. “Terrenos hay, pero falta financiación que esperamos encontrar con la ayuda del presidente de la Ciudad”, dijo.
Aberchán “se confundió”
Sobre este particular, se preguntó al consejero por qué el grupo de CPM se abstuvo en el pleno del miércoles a la hora de aprobarse destinar parte del superávit municipal a inversiones financieras sostenibles. Aseguró Bussian que todo se debió a que el cepemista Mustafa Aberchán “se confundió, porque pretendía abstenerse en el punto 4.13 que se refiere al pago de facturas impagas del anterior gobierno”.
Hubo “una confusión en los puntos del orden del día, pero él tenía interés en aprobar” el capítulo de inversiones, porque “no sería muy coherente que defendiéramos un proyecto” y se abstuvieran al final. “Ha sido, llanamente, un error porque pensaba que esos tres puntos del orden del día estaban relacionados con la 4.13”, reiteró el consejero cepemista.
