Ayer, el proyecto de INBIOMAR, de la Fundación Biodiversidad y cofinanciado por la Federación Melillense de Actividades Subacuáticas y el Club Ánfora, realizó su I Jornada ‘Conociendo la biodiversidad marina que nos rodea’ con una serie de acciones tanto para grandes como para pequeños. Por la mañana, los centros educativos Enrique Soler y Juan Antonio Fernández fueron partícipes de las actividades que prepararon un grupo de profesionales del proyecto para los alumnos, con un único objetivo que se extiende a todas las edades: Concienciar acerca del mantenimiento de la biodiversidad marina.
Melilla puede presumir de fondos marinos, o al menos en algunas zonas de sus aguas mediterráneas. Esto es lo que demuestra este proyecto de investigación, INBIOMAR, que se está llevando a cabo por un grupo de 16 personas “multidisciplinar”, como señala José Antonio Sanabria, miembro y partícipe en esta iniciativa.
Sanabria explica que “con esta Jornada lo que queremos es hacer partícipes a los melillenses de lo que hemos visto y estudiado durante el desarrollo de INBIOMAR, que es un proyecto científico”.
Concienciación
El portavoz señala que “por la mañana hemos realizado una serie de actividades por los centros escolares, ya que los más pequeños son un claro objetivo de concienciación sobre el mantenimiento de la flora y fauna marina”.
Claro está, Sanabria explica que las actividades que se realizaron en los centros con los estudiantes estuvieron enfocadas de forma “lúdica, sin tecnicismos”.
Por otro lado, a partir de las cinco de la tarde, hora de la inauguración, la I Jornada dio comienzo con una primera conferencia de una miembro del grupo de investigadores, Laura Palacín, en el Real Club Marítimo.
Desde las 17:30h hasta las 20:30 alrededor de una veintena de melillenses aprendieron y conocieron más detalles acerca de la fauna y flora marina de la zona, con un total de seis conferencias.
“Los datos que vamos a mostrar durante las ponencias, de varios profesionales que participan incluso desde Madrid, a distancia, son los que se han recogido durante los inventarios realizados en áreas como la zona ZEC de Aguadú, del Peñón Vélez de Gomera y el archipiélago de Alhucemas”, detalla José Antonio Sanabria, miembro del equipo investigador.
Especies amenazadas en conservación
Durante las distintas ponencias que se realizaron en el Real Club Marítimo, se ofreció una serie de detalles que llamaron la atención a todos los amantes de los fondos marinos. Según José Antonio Sanabria, “dentro de las Zonas de Especial Protección (ZEC) hemos encontrado grandes paredes de Coral Naranja, una especie amenazada y que ha reflejado que esa área no está siendo perturbada por la actividad humana”. Del mismo modo, resaltaron que “una de las mayores sorpresas ha sido ver la vocación de las personas de querer conocer más sus fondos, ya que hemos realizado cientos de inmersiones y siempre lo resaltaban”. Como sorpresa de esta Jornada, se anunció que “próximamente habrá un INBIOMAR II, ya que este proyecto acabará el 31 de diciembre”, añadieron.
