El viceconsejero del Menor y Familias de Melilla, Abderrahim Mohamed, anuncia la puesta en marcha de distintas acciones encaminadas a la inserción social y laboral de los menores acogidos, entre las que se encuentra la creación de una unidad de acompañamiento a la vida adulta, institucionalizar los premios a la excelencia, y potenciación de los talleres prelaborales junto a los de ocio y tiempo libre. Mohamed, que asegura que existe una imagen distorsionada de los menores, afirma que con los planes en marcha se acabará también con los menores en situación de calle. En rueda de prensa, el viceconsejero ha asegurado que los centros de protección de menores no se limitan a cubrir las necesidades físicas, sino que por ley se les presta asistencia psicológica, educativa, formativa y de inserción, y que los centros están concebidos como “macro hogares donde se sientan felices” el tiempo que deban permanecer. En este sentido, afirmó que el Gobierno de la Ciudad se ha marcado unos “objetivos inamovibles” para esta legislatura que se traducen en medidas de “socialización, formación, y visibilidad”.
Acciones
Entre esas medidas se incluye institucionalizad los premios a la excelencia, con los que se quiere “incentivar la creatividad, el ingenio, el buen comportamiento y el gran esfuerzo de los menores acogidos”, unos reconocimientos que, como se pudo comprobar en su primera edición, “fueron un éxito”.
Asegura que con estos premios los menores de acogida “pueden mostrar su valía en diferentes campos y áreas”, permitiendo así “visibilizar a un colectivo que mediática y socialmente tiene una imagen distorsionada y estigmatizada por la sociedad que les acoge y se rompe el tabú”.
Anunció, dentro de esas acciones enfocadas a la “integración y socialización” de los menores, es poner en práctica un proyecto más ambicioso que el actual en la plaza de toros que incorporaría a los talleres prelaborales, otras acciones de tipo deportiva y de ocio y tiempo libre, con lo que “se daría vida a la plaza gracias a los menores tutelados”.
Además se ha enviado un escrito a la Federación de Fútbol pidiendo que se federe a los menores acogidos, para que así “no haya obstáculos y sean iguales al resto de los ciudadanos”, pero también dijo que se potenciarán los cursos y talleres de formación mediante acuerdos con ongs que trabajan en la ciudad.
Los centros de acogida, que ya realizan actividades de ocio y tiempo libre, potenciarán “los programas de integración, inserción, inmersión lingüística y de inserción social, y se creará una unidad de acompañamiento y preparación para la vida adulta”, añadió el viceconsejero.
Abderrahim Mohamed afirmó tener la “certeza firme de que se pueden tomar medidas para ir a una Melilla sin niños en la calle”, y en este sentido anunció la puesta en marcha de un programa “educativo integral para menores en exclusión social” y con cargo a los presupuestos de 2020, saldrá a concurso un nuevo programa de educadores de calle no solo de intervención, sino “educativo y terapéutico”.
Sólo 40 niños en la calle
El viceconsejero aseguró que en Melilla “la imagen que se tiene de los menores de la calle no es la verdadera, porque estamos hablando de unos 30 a 40 menores, y el resto, la gran mayoría, son mayores de edad que han estado tutelados por la Ciudad y han cumplido la mayoría de edad”.
Afirma que se trabaja para acabar con esta situación de calle y reconoce que no son menores “que acaban de salir de casa, sino jóvenes que están enganchados a las drogas, menores que su modo de vida era este antes de venir a Melilla, por lo tanto, estamos en ello y desde la Consejería se hará lo posible por conseguir su inserción y vuelvan a los centros de acogida”.
Apoyo al personal de Purísima
El viceconsejero quiso dar su apoyo a los trabajadores del centro de Purísima por “el sesgo informativo” del reportaje periodístico publicado por un medio nacional en el que se habla de malos tratos en el centro. Mohamed se sumó al escrito de réplica de estos trabajadores y en contra “del linchamiento continuo y rumores indiscriminados que reciben estos trabajadores”.
“Nuestro apoyo va a la labor continuada y socioeducativa del trabajo diario que este personal desarrolla para con los niños; empleados que cada día acuden a su puesto de trabajo ilusionados con su labor educativa, social y formativa, convencidos de lo que hacen y volcándose continuamente con los menores”, apostilló.
