La ciudadanía ha podido ver con total claridad, que el PSOE ha sido el partido más votado tres veces seguidas y que aún no puede formar un gobierno serio o al menos con capacidad de gobernar España, dentro de un contexto en el que nos garantice cierta seguridad.
El PSOE nunca quiso un pacto con PODEMOS y eso lo sabemos todos, ni quiere pactar con Ezquerra Republicana de Cataluña ni con el PNV, pero ha sido la irresponsabilidad de Cs lo que, en primer lugar, ha eliminado su oferta ciudadana y, en segundo lugar, lo que ha hecho que la derecha más ultra conservadora de VOX le tome el relevo…Para que Cs quiera pactar solamente con el PP, que pacte VOX…Más lógico imposible.
El único pacto serio es que Cs, que ha nacido para quitarle poder a un nacionalismo independentista, que siempre nos ha sangrado, ofrezca un pacto de gobierno con el PSOE, que es el partido que ha ganado las elecciones y el PP, que es la oposición, proponga para ese pacto una serie de condiciones para su abstención y la futura aprobación de los presupuestos que nos garanticen la gobernabilidad durante cuatro años.
Durante los anteriores comicios el pueblo español ya dejó claro la coalición que daría mayoría absoluta en el parlamento, y como Cs no cumplió con la misión con la que apareció su partido a nivel nacional, le costó una debacle electoral y la dimisión de su líder.
Algunos dirigentes del PP y periodistas deben de dejar de barbaridades de crear un gobierno de coalición PP – PSOE y empezar a madurar si quiere ser la derecha de este país, porque si hace un gobierno de coalición con el PSOE, le va a pasar igual que a Cs…VOX lo va a machacar…Quien sea de derechas votará a VOX y quien sea de centro votará al PP.
Así que ahora, desde mi perspectiva, el PP tiene que asumir la responsabilidad de un pacto PSOE-Cs condicionado. Ese es el único pacto responsable y estratégico en estos momentos que se puede plantear el Partido Popular si quiere seguir teniendo aspiraciones de gobernar España. Un pacto que ya debería de estar pactado desde el verano, pero que siempre se está a tiempo de rectificar, sobre todo cuando se alardea de amar a España.
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