El viceconsejero del Menor y la Familia, Abderrahim Mohamed, anuncia que se pretende acortar los plazos al objeto de reducir el número de niños que actualmente se encuentran acogidos en centros como la Gota de Leche y al mismo tiempo incrementar el número de familias acogedoras de la ciudad. Calcula Mohamed que unos 25 niños de 0 a 6 seis se podrían beneficiar de esta medida. En declaraciones a este Diario, manifestó el viceconsejero que se pretende poner en marcha una campaña para aumentar el número de melillenses que se sumen al programa de acogimiento familiar. “En estos momentos contamos con una treintena de familias que acogen a otros tanto menores tutelados por la Ciudad Autónoma, con lo que se evita que estos niños crezcan en una institución, sino en un ambiente familiar”, indicó.
No hay que olvidar que “siempre prima el interés superior del menor y por eso pretendemos que estos niños estén acogidos en el seno de una familia, por los beneficios que ello aporta en su desarrollo”.
Familias
Las familias de acogida deben “velar por ese interés superior del menor, por su bienestar, alimentándolos, educándolos y protegiendo”, indicó el viceconsejero, que recordó que para participar en el programa los interesados deben cumplir toda una serie de condiciones y requisitos. “En Melilla tenemos actualmente a una treintena de familias de acogida que reciben una ayuda de unos 300 euros al mes por menor acogido, y en estos momentos tienen bajo su cargo a treinta niños de entre 0 y 10 años”, detalló.
Mohamed afirmó que se quiere potenciar este programa de acogimiento familiar acelerando la resolución de los expedientes, porque “actualmente resulta muy engorroso y desde que se finaliza la tramitación hasta que se produce la resolución transcurre demasiado tiempo, y eso es un clavario tanto para los futuros acogedores como para los propios menores”.
Dejó de manifiesto el viceconsejero que “estamos hablando de un tema muy serio, como son los menores y su protección, y que cuando nos referimos a acortar el tiempo de espera en la resolución de los expedientes no quiere decir que no se haga con el mismo celo de siempre, exigiendo toda la documentación que se quiere, porque no cualquier familia puede tener acceso a este programa”.
Por ese motivo, “se seguirá pidiendo a los futuros acogedores que reúnan todos los requisitos tradicionales, como el que no se encuentren investigados o con medidas de protección de menores, y que no hayan sido condenados”.
Los adolescentes, los grandes olvidado
Explicó el viceconsejero del Menor y la Familia, que en Casa Cuna se encuentran unos 14 niños susceptibles de ser incluidos en el programa de acogimiento familiar, a los que suma otros siete niños de unos seis años también en protección, que suman unos 25. Entre ellos hay tanto menores melillenses como extranjeros.
Pero no descarta Abderrahim Mohamed que el programa pueda ampliar la edad de acogida de los menores tutelados. “Sería interesante poder aumentar la franja de edad, porque tradicionalmente se tiende al acogimiento de niños de muy corta edad, de entre 0 y 6 años, pero hay otros muchos que también se podrían beneficiar, como los mayores de 10 años e incluso los adolescentes, que son los grandes olvidados”, dijo.
