El secretario general del Partido Popular en Melilla, Miguel Marín, afirmó ayer que la declaración conjunta de reivindicaciones firmada entre los presidentes de Ceuta y Melilla “esa pura literatura” porque no recoge acciones concretas, al tiempo que asegura que el Gobierno local hace en Melilla todo lo contrario a lo que reivindica en el acuerdo con Ceuta. Entre otros ejemplos expuso que no se puede potenciar la llegada de turistas cuando se ha eliminado la partida para los bonos transportes para no residentes. Marín afirma que la declaración institucional firmada entre los presidentes de Ceuta y Melilla “no recoge ni una sola medida concreta para mejorar la situación crítica que vive Melilla” y entiende que es solo “pura literatura cuando no recoge propuestas concretas para revertir” la crisis por la que atraviesa la ciudad.
Contradicción
Pero al secretario general del PP afirma que no esperaba otro resultado, porque “nada se puede esperar de un Gobierno tripartito que tras ocho meses no tiene ni un programa de gobierno”, pero sí le sorprende que De Castro firmara una declaración en la que se recogen “lo que se debe hacer, pero en estos meses de gestión están haciendo todo lo contrario”.
Ejemplo de ello es que la declaración demanda medidas urgentes para apoyar el comercio de la ciudad mientras que en Melilla “se reduce en 600 mil euros el dinero destinado a los planes de formación para desempleados o los 200 mil euros de Promesa para ayudas a la creación de empresas”.
Otro ejemplo de esa contradicción a la que hace referencia, es que demanden que se dote a la Policía y Guardia Civil de nuevos recursos, mientras que denuncia que en Melilla el PSOE no ha aportado los 400 agentes “que prometió y que no cubre ni siquiera las 38 vacantes de la Jefatura”.
También hizo hincapié en que se pidan más inversiones para Melilla pero “no apoyan” la que ha calificado como “la inversión más importante de la historia de la ciudad como son los 295 millones para la ampliación del puerto que viene recogido en los Presupuestos Generales del Estado”. “Están paralizando inversiones que crean empleo, inversiones básicas y estratégicas para el futuro de Melilla, y se van a Málaga a firmar una coda y aquí hacen otra cosa”, denunció el también diputado local del PP en la Asamblea.
Otro asunto es el de los menores extranjeros no acompañados, que mientras en la cumbre de Málaga se insta al Gobierno a que exija a Marruecos el cumplimiento del acuerdo de readmisión, en estos ocho meses los 750 menores marroquíes acogidos en Melilla y que han sido identificados “no se han puesto a disposición de sus familias”.
También considera una contradicción que se apueste en esa declaración por favorecer la llegada de turistas no residentes, mientras que en los Presupuestos de la Ciudad de este año “se suprime la partida de 1,2 millones para los bonos de transporte para los no residentes, y sin esa ayuda, venir a Melilla es más caro que irse al Caribe”, apostilla.
Afirma Miguel Marín que estos ejemplos “son hechos objetivos que demuestran que el Gobierno de la Ciudad fue a Málaga a hacerse la foto, porque no predica con el ejemplo”, y es que asegura que “firmaron todo lo contrario de lo que están haciendo en la ciudad”.
El esperpento del Régimen Económico y Fiscal
Afirma que es “un esperpento” que se quiera mejorar el régimen económico y fiscal (REF) y se alegue que sea siempre lo que permita la ley, porque afirma Marín que es “una obviedad”. Señala que las leyes se cambian en las cortes y de hecho el PP “logró modificaciones legislativas que trajeron la bonificación del 50% de las cuotas patronales a la seguridad social, la ampliación al 60% de la devolución del IRPF”. Esa decir, las reformas “se impulsan desde los gobiernos y en las cortes, pero en la declaración institucional no aportaron ni una sola medida para la reforma del REF”, dijo.
“Algo que es para nota, que espero no se marquen como un logro, es que nos devuelvan el dinero que el actual Gobierno del PSOE no nos ha ingresado” en 2019, porque “ese dinero pertenece a Melilla, no es un logro nuevo, sino algo que hay que exigir y cuando se haga, será con retraso”.
