Nasser Bagdad, presidente del C.D. Virgen de la Victoria de Melilla, está expectante ante la decisión que pueda adoptar la Real Federación Española de Balonmano, con respecto a que se reanude la competición o que finalmente se suspenda, con motivo de la crisis del coronavirus. No obstante, el dirigente ya piensa en la próxima temporada y avanzó que el gran objetivo debe ser el de aspirar a estar en la zona alta para poder jugar la fase de ascenso a la División de Honor de Plata. Mientras tanto, expresó su gran deseo de que “esta situación pase lo antes posible” y que todos los melillenses “sigan cuidándose en sus casas”. El máximo exponente del club melillense indicó que todo sigue igual desde que la Real Federación Española de Balonmano aplazó la competición y se decidiera suspender los entrenamientos de forma colectiva, aunque resaltó que el gran deseo de todos es volver a la normalidad. “Los jugadores están bien, cuidándose cada uno en su casa, y además siguen un plan de entrenamiento individualizado que les he mandado el entrenador”.
Por otro lado, informa que con el entrenador Faisal Salmi mantiene un contacto continuo, aunque reconoce que en la mente de todos está ya la próxima temporada. “Con el entrenador mantengo un gran contacto, pensando ya en la próxima temporada, aunque todavía estamos a expensas de saber la decisión de la Federación Española con respecto a este curso, bien si se reanuda la competición o si finalmente se suspende”.
No obstante, afirmó que la decisión que se adopte “no afectará de forma negativa” a la plantilla, pero “es cierto que si se reanuda la competición, el problema está en las fechas para reestructurar el calendario de la competición, aunque la gente está con ese miedo y no sé si están para jugar”.
Próxima temporada
Por otro lado, está totalmente de acuerdo con las declaraciones de Faisal Salmi, en hacer una total revolución en la confección de la plantilla de la próxima temporada para poder aspirar a jugar la fase de ascenso. “Mi pensamiento es el de estar arriba, pues la permanencia se nos queda ya pequeña. Los jugadores de casa ya han adquirido cierta experiencia y veteranía, y lo que hay que hacer es intentar fichar bien para estar lo más arriba posible”.
“La idea es confeccionar media plantilla de jugadores de casa y la otra mitad de la Península, con el objetivo de reforzar el plantel con efectivos que marquen las diferencias para que podamos estar entre los tres primeros clasificados”, resaltó el presidente del C.D. Virgen de la Victoria.
En este sentido, avanzó que el club ya está trabajando, ahora que hay mucho tiempo de tiempo libre y para poder pensar. “Los componentes de la directiva, hemos mantenido ya varias reuniones a través de videoconferencias para tratar sobre los fichajes del próximo curso, pero de momento todo está parado por la situación en la que nos encontramos, pues no se sabe si la Liga se va a suspender definitivamente o si se reanudará. Hay que esperar quince o veinte días para que se pronuncie la Federación Española y a partir de ahí todos los clubes van a mover ficha”.
Anális de la temporada
En otro orden de aspectos, analizó la campaña del C.D. Virgen de la Victoria de Melilla en la competición. “Faisal Salmi dijo, recientemente en este medio, que la temporada es la peor del club desde que milita en categoría nacional, pero hay que tener en cuenta otros aspectos que nos han impedido estar en la zona media alta, ya que casi desde el inicio de Liga hemos tenido en la enfermería a los jugadores con diversas lesiones, tanto los de casa como los de fuera”.
Sin embargo, reconoce que el equipo comenzó “muy bien” la temporada, clasificado en la zona alta, “pero luego tuvimos un bajón muy grande y tras las vacaciones de Navidades se produjo la dimisión del entrenador Pablo Torres, aunque no fue una sorpresa, pero él tomó esa decisión y hay que respetarla”.
“Los jóvenes jugadores del club deben tener como reflejo al primer equipo”
Nasser Bagdad indicó que tras la dimisión de Pablo Torres, el club apostó de nuevo por Faisal Salmi, ya que en los tres años anteriores realizó una gran labor y consiguió el objetivo de la permanencia. Precisamente, en la primera temporada salvó, de forma milagrosa, al equipo, cuando estaba prácticamente descendido, tras sustituir al anterior técnico, Nacho Vico.
“Faisal Salmi es la mejor opción que siempre hemos tenido, aunque al final del pasado curso nos pidió dar un paso al lado para estar como segundo técnico. El mejor que nadie conoce a la plantilla y esa revolución que pide para el próximo campeonato no se entendería sin él, aunque también hay que asentar la base para que los jóvenes jugadores tengan como reflejo al equipo de la Primera División. El entrenador ayuda mucho en eso, pues conoce a todos los jugadores y las directrices del club”, concluyó el presidente del club melillense.
