La Dirección General de la Marina Mercante autorizaba a la naviera África Affairs el establecimiento de una línea entre Melilla y la Península, con un buque de alta velocidad con capacidad para 600 pasajeros y 170 coches. La Delegación del Gobierno señalaba que la empresa debía acreditar, en dos meses, los requisitos legales. África Affairs esperaba comenzar a operar a finales de abril.
26 alumnos del curso de croupiers que había organizado el futuro Casino de Melilla para formar a su personal especializado en las distintas vertientes de suerte que ofrecería, recibían el diploma acreditativo. La intención de los responsables era que el casino abriera en verano. La Dirección General de la Marina Mercante autorizaba a la naviera África Affairs el establecimiento de una línea entre Melilla y la Península, con un buque de alta velocidad con capacidad para 600 pasajeros y 170 coches. La Delegación del Gobierno señalaba que la empresa debía acreditar, en dos meses, los requisitos legales. África Affairs esperaba comenzar a operar a finales de abril.
26 alumnos del curso de croupiers que había organizado el futuro Casino de Melilla para formar a su personal especializado en las distintas vertientes de suerte que ofrecería, recibían el diploma acreditativo. La intención de los responsables era que el casino abriera en verano.
