Vox, a través de la diputada nacional por Ceuta Teresa López, volvió a preguntarle al Gobierno si va permitir que Marruecos siga imponiendo sus decisiones estratégicas a España. Así, y según informaba el Pueblo de Ceuta, registraba el pasado 25 de febrero una batería de preguntas dirigidas al Ejecutivo de Pedro Sánchez para conocer si va a dotar de medios materiales y vehículos acondicionados a policías y guardias civiles en las fronteras terrestres de España en África, en lugar de seguir financiando la renovación de la flota de vehículos de Marruecos.
Sin embargo, la respuesta no ha planteado más que dudas y por ello López ha registrado una nueva batería de preguntas para que el Gobierno defina claramente su postura ante un Marruecos que en los últimos meses ha ampliado unilateralmente sus aguas territoriales y ha iniciado una estrategia de asfixia económica de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.
La diputada nacional por Ceuta advierte de que “llama la atención” que el Ejecutivo, en su respuesta, afirme que “España mantiene con Marruecos unas excelentes relaciones bilaterales que se despliegan en multitud de ámbitos y en este marco se van desarrollando los avances para mejorar los flujos migratorios irregulares”. Y Vox cuestiona “qué quiere decir el Gobierno al referirse a excelentes relaciones bilaterales con Marruecos” cuando la situación fronteriza en Ceuta ha provocado que la ciudad haya registrado, desde el pasado verano una constante entrada ilegal de menores por la frontera, cifrada en una media superior a los 50 jóvenes al mes.
“En estos momentos viven en Ceuta más de 600 menores marroquíes, y debido al estado de alarma y el hacinamiento de estos menores en el centro La Esperanza, el Gobierno local ha tenido que habilitar un albergue provisional a base de módulos prefabricados y tiendas de campaña”, informó López al Ejecutivo de Sánchez, por si desconoce la situación, para recordar que, en Melilla, esta es aún “más dramática” con más de 1.600 MENA acogidos. Además, señala que de los CETI de las dos ciudades han tenido que ser trasladados centenares de inmigrantes subsaharianos y argelinos por el desbordamiento de los centros.
En esta línea, López subraya que como Marruecos no se ha querido hacer cargo de los transfronterizos tras el cierre de la frontera, Delegación de Gobierno se incautó de dos polideportivos para alojar a este colectivo, así como a MENA e inmigrantes durante el estado de alarma. Situación a la que se une que ya Marruecos decidió cerrar la aduana comercial de Beni-Enzar el 1 de agosto de 2018 en Melilla, para proseguir en noviembre de 2019 con el cierre del paso de mercancías del Tarajal en Ceuta y en febrero no dejar pasar pescado por las fronteras de ambas ciudades autónomas.
