La Consejería de Infraestructuras, Urbanismo y Deportes ha pedido a la Consejería de Hacienda la reactivación de la mesa de contratación, paralizada por el estado de alarma, para poder impulsar nuevas obras y permitir que el sector de la construcción actúe como “palanca” para la recuperación de la economía y el empleo. En rueda de prensa, el consejero de Infraestructuras, Rachid Bussian, explicó que el área de Hacienda ha mostrado su predisposición a que la mesa de contratación reanude su actividad la próxima semana, momento en que se dará por terminado el proceso de adjudicación de ocho inversiones financieras sostenibles que suponen tres millones de euros.
Algunas de estas actuaciones, según Bussian, ya estaban adjudicadas y pendientes de la firma del acta de inicio de la obra, mientras que otras están pendientes de finalizar el proceso de licitación para poder arrancar.
El consejero destacó la importancia de esta medida por la generación de riqueza y creación de puestos de trabajo que suponen las obras, razón por la que Infraestructuras también tiene previsto empezar de forma inminente con otra importante actuación para la remodelación de la calzada y parte del acerado de la calle Tadino de Martinengo y adyacentes.
Este proyecto, según Bussian, supondrá una inversión de 824.000 euros y está ya adjudicada, por lo que empezará en cuanto se firme el acta de inicio de la obra, que tiene previsto generar una quincena de empleos durante los cuatro o cinco meses que tiene de plazo de ejecución.
Ctra. Alcazaba
Al hilo, también anunció la próxima apertura, el 15 de mayo, de la Carretera de la Alcabaza, donde se ha ejecutado un proyecto de reparación y reposición del firme y la capa de rodadura, obra que estaba previsto desarrollar en un plazo de dos meses que, finalmente, se ha visto reducido a la mitad.
Destacó la importancia de esta obra por la mejora que supone para un importante nudo de comunicaciones en una zona que conecta el centro urbano de la ciudad, el cementerio cristiano, el barrio de Monte María Cristina y toda la zona de Ronda Compañía de Mar, además de la cuesta de Horcas Coloradas.
Una vez que se esté en disposición de abrir al tráfico a partir del 15 de mayo, el consejero dijo que tendrá que ser decisión de Medio Ambiente, Seguridad Ciudadana y Delegación del Gobierno si se mantiene cerrada a la circulación de vehículos, habida cuenta que es una de las zonas más concurridas para hacer deporte desde la implantación de las franjas horarias por la pandemia.
Motor económico
En definitiva, insistió en la necesidad de apostar por el sector de la construcción como motor económico en las próximas semanas en un momento en el que “la frontera está cerrada, los comercios parados y el sector hostelero en horas bajas”.
“Entendemos que la inversión pública en el sector de la construcción tiene que ser un eje fundamental para la reactivación económica”, apostilló Rachid Bussian al subrayar el impacto que suponen las obras en la recaudación de las arcas públicas y en cuanto a la mano de obra, los proveedores, las constructoras o las empresas encargadas de la maquinaria, por ejemplo.
Transfronterizos
En cuanto a la mano de obra, admitió que el cierre de la frontera tiene como consecuencia la imposibilidad de contar con muchos trabajadores transfronterizos en las obras que se desarrollaban en la ciudad, si bien instó a hacer “una lectura positiva” porque “es una buena oportunidad” para recurrir a los desempleados melillenses de este sector, que son “un número importante”.
En este sentido, explicó que los trabajadores transfronterizos tienen una mayor experiencia en el sector, pero a su juicio eso no debe ser obstáculo para apostar por la mano de obra local, algo que ya ha hecho alguna empresa constructora dedicando “un tiempo prudencial” a la formación de los peones, lo cual “puede ser una fórmula para que los desempleados puedan incorporarse”.
Medidas de seguridad
Las obras, señaló el consejero, se están desarrollando con medidas adicionales de seguridad establecidas en protocolos de actuación ante la pandemia, dictadas por los colegios profesionales de arquitectos e ingenieros, entre las que se encuentran mantener el distanciamiento social, disponer de equipos de protección individual y extremar las medidas de higiene.
Servicios mínimos en la obra del colegio Gabriel de Morales
La obra de construcción del colegio Gabriel de Morales sigue adelante durante la pandemia del coronavirus, aunque “en servicios mínimos”, según apuntó ayer el consejero de Infraestructuras, Urbanismo y Deportes, Rachid Bussian. Tras recordar que se trata de una obra del Estado, explicó que su departamento está pendiente de la evolución porque tiene presupuestada para este año una partida para la posible urbanización de la zona, el antiguo cuartel de Automovilismo. Sin embargo, el consejero cree que gran parte del dinero que hay reservado para esa actuación solo se podrá destinar a la redacción del proyecto, debido a la necesidad de llevar a cabo un reajuste presupuestario y el hecho de que la obra va con “retrasos lógicos” de unos dos o tres meses por el estado de alarma.
Además, explicó que en la zona se han localizado restos de uralita, por lo que la Ciudad Autónoma, en colaboración con la empresa constructora y el Gobierno central, está trabajando para solventar el problema.
