Solo parecía que respirabas otro aire, que los sitios comunes de trabajo o de ocio eran de otra manera y los echabas de menos. Los lugares no son solo espacios, son lo que en ellos hemos vivido . Y de pronto nos los quitan. Volvemos donde cada día nace el afán y allí soñamos, teletrabajamos, nos desesperamos, amamos, creamos y desarrollamos otras sendas. Son tiempos de inventivas y quienes no sean capaces de hacerlas se quedarán en el camino. Esta semana de fase 1 que en Melilla llevamos ha hecho que en las calles se vean muy pocas mascarillas, que las distancias de seguridad no se mantengan siempre y que los que corren pasen a nuestro lado echando sudor y aliento. Nada así es comprensible y la relajación debemos dejarla para otros momentos, parece que no somos conscientes de las cifras de fallecidos, sin duda menores a los que la realidad, esta sí aplastante nos revelará en breve. Ayer Salvador Sostres en su columna de “ABC” decía. “¿Que nos pedirían los muertos?, se ha preguntado Sánchez. Yo se lo voy a responder. Nos pedirían lo que todas las víctimas piden, que es justicia. Nos pedirían que nadie pusiera sus sucias manos sobre sus cadáveres, nos pedirían que además de haber muerto no les volvieran a asesinar con mentiras”. Mientras se pretende ampliar por un mes más el estado de alarma en el próximo Pleno del Congreso a celebrar este miércoles día 20. Y estalla con todo el sufrimiento que están padeciendo las familias afectadas por el COVID-19 el acoso y derribo contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y por ende quienes allí viven. Observemos la cronología de los hechos. A las siete de la tarde del viernes, el ministro Illa y Fernando Simón anunciaron en rueda de prensa que la Capital sigue en fase 0. A las nueve menos diez, la Comunidad publica un comunicado en el que critica la falta de explicaciones y reclama un informe. Al filo de las diez de la noche, tres horas después de la comparecencia de Illa y Simón, la directora general de Salud Pública, firma el informe. Todo ocurre después que Díaz Ayuso anunciara que iba a denunciar en los Tribunales a Salvador Illa por no mostrar las razones por las que se impedía a Madrid pasar de fase. Y otra cifra, cada semana en Madrid por continuar en la fase 0, hay dieciocho mil puestos de trabajo que se pierden. No se puede seguir así, ni con la irresponsabilidad de quienes no se ponen mascarillas ni con quienes impiden pasar a la fase 1 a la Capital.
