La Consejería de Economía y Políticas Sociales se está planteando cambiar el concepto del Ingreso Melillense de Inserción (IMI), que tras la llegada del Ingreso Mínimo Vital (IMV) aprobado por el Gobierno central no desaparecería.
La idea, según expuso el consejero de del área, Mohamed Mohamed Mohand, sería que el IMI tuviera un concepto diferente del que ha tenido hasta ahora relacionándolo con las políticas activas de empleo, de modo que los beneficiarios tengan mayores opciones de entrar en el mercado laboral. “La mejor política social es la política del empleo”, aseveró el consejero antes de apuntar que, para conseguirlo, sería necesario vincular el IMI al Plan de Lucha contra la Pobreza de la Ciudad Autónoma.
En rueda de prensa, Mohamed Mohand argumentó esta idea al apuntar que el IMV recién aprobado y publicado ayer en el BOE, aparentemente, superará en el importe al IMI que concede la Ciudad Autónoma. Por ello, aplicar el IMI en el mismo sentido que hasta ahora, en palabras del consejero, “no tendría sentido” y queda “desfasado”.
Así, la idea es que el IMV sirva “como suelo” de la prestación de las personas beneficiarias, de manera que el IMI establezca “el techo”.
En su comparecencia, salió en defensa del IMV, que calificó como “histórico”. “No hay mejor forma de tener a ciudadanos en igualdad de condiciones que a través de una prestación social”, afirmó el consejero, convencido de que “ningún país que se digne llamar del Primer Mundo puede tratar a la gente más desfavorecida como si no existiera”.
