El ex consejero de Deporte informa en esta segunda parte de la entrevista a MELILLA HOY sobre diferentes cuestiones del deporte local, como la apuesta por determinados clubes deportivos de categoría nacional para conseguir, de forma decidida, los objetivos planteados. Antonio Miranda Montilla también considera fundamental proyectar el golf melillense y el deporte femenino, y reconoce que mantiene una buena relación con el actual consejero de Deporte, Rachid Bussian, aunque denuncia que nunca tuvo el apoyo de la Consejería de Fomento, en la anterior legislatura en la que gobernó el Partido Popular. En la edición de mañana lunes, ofreceremos a nuestros lectores la tercera y última parte de la entrevista con el anterior responsable deportivo de la Ciudad. -¿El pasado año se perdió una gran oportunidad de ascender a la Segunda División del fútbol nacional?
Sí, la U.D. Melilla, de la mano de Carrión, hizo una gran temporada, pero el Atlético Baleares nos eliminó en las semifinales. El ascenso habría sido un tirón muy importante, pues el fútbol, en Segunda División, te puede meter 5.000 espectadores, lo que no puede conseguir el baloncesto. Siempre digo que la imagen de Melilla en dicha categoría tiene un efecto importante porque ya están los medios de comunicación, los ingresos por Televisión, las quinielas. Y además ahí está la Ciudad Autónoma que siempre aporta 1 millón de euros, lo que se ve en pocos sitios.
Precisamente, cuando el Melilla Baloncesto jugó en Burgos, hace algunas temporadas, asistí a dicho partido y el director de deporte de dicha localidad me comentó que su ayuntamiento se portaba muy bien con el equipo de baloncesto, entregándole 75.000 euros, pero cuando le dije que la Ciudad Autónoma le daba 1 millón de euros de subvención al Melilla Baloncesto no se lo creía.
-¿Qué le ha faltado por hacer como consejero?
Tenemos a 15 equipos en categoría nacional, pero cuando me fui de la Consejería de Deporte me faltó una cosa por hacer, potenciar el deporte femenino, aunque teníamos ya a los equipos de La Salle y del Torreblanca Melilla, y tener a estos dos equipos en categoría superior no es caro. También ha ascendido el Club Voleibol Melilla y lo ha hecho muy bien en su debut en categoría nacional. De igual modo, hay que atender el deporte de la Ciudad y a los melillenses les gusta practicar muchas modalidades deportivas. Por cierto, he pasado estos días por el Campo de Golf de la Ciudad y me ha dado mucha pena, pues parece un desierto, completamente abandonado. Yo no he jugado nunca al golf, pero siempre he dicho que es el deporte y la Federación que menos problemas me ha dado desde que me hice cargo de la Consejería de Deporte en junio de 2015, mientras que sí los había en otras instalaciones y clubes, pero otra cosa es lo que hicieron a nivel político de llevar al golf al juzgado. No estuvo bien lo que hicieron y se ha demostrado, ya que todo salió muy bien para el golf.
-¿Qué le parece la situación actual del golf en Melilla?
Si hay doscientas personas que quieren jugar al golf, pues vamos a dejar que jueguen, además de promocionar este deporte. No sé en qué situación está ahora la instalación, pero para que la gente lo entienda y lo tenga muy claro, ha sido la Federación que menos problemas nos ha dado. Además, este deporte experimentó una gran mejoría con la llegada de su actual presidente, Enrique Bohórquez, que impulsó al golf, pues de 40 federados que había pasó a tener 400 en dos años, recibiendo la felicitación de la Federación Española, ya que en ningún otro sitio de España hubo un aumento de practicantes como el que había tenido Melilla. Sin embargo, hubo una actuación política, en contra del Partido Popular y del presidente de la Federación Melillense de Golf, pero como he comentado antes todo ha salido muy bien y ahora vendrán las responsabilidades para esas personas a las que les gusta disparar en el tema de la política. Siempre he comentado que con el deporte se hace turismo, y tengo unas estadísticas del año 2018 con la visita de foráneos a Melilla, quitando lo que aportan los 15 equipos de categoría nacional, de unas 8.000 personas, entre la Carrera Africana, la Copa de Europa de Triatlón, las selecciones nacionales de baloncesto y balonmano, tanto en masculino como en femenino… Eso al final es dinero que ingresa la Ciudad. Por aquí sólo ha faltado por pasar la selección española de fútbol absoluta, pero ha sido porque el Estadio Municipal Álvarez Claro no reunía las condiciones.
-¿Si Melilla no puede sostener a tantos equipos en categoría nacional qué se puede hacer?
Pues apostar por determinados deportes, como en su día ocurrió en Teruel y se conoce a dicha ciudad por el voleibol. Por ejemplo, si te gastas en el fútbol sala, 700.000 euros, el Melistar F.S. jugaría contra el Barcelona y el Interviú, pero además participaría en la Copa de Europa. Jaén lo ha hecho y se conoce a esta ciudad por el deporte del fútbol sala.
-¿Cuál sería su apuesta?
Yo no me centraría solo en baloncesto y fútbol, sino en varios equipos, pero también invertiría en deportes locales con gran proyección, como es el caso del golf. Precisamente, el Campo de Golf de Melilla reúne todas las condiciones para atraer a gente de fuera, con los mejores jugadores de Andalucía y de Marruecos. Luego las tasas en Melilla son más baratas que ir a otro sitio a jugar, aunque yo creo que deberían desaparecer y sustituirlas por precio público. Si el Campo de Golf y el Fuerte de Rostrogordo -que por cierto lo van a destrozar- lo coge una empresa privada le saldría a la Ciudad un cincuenta por ciento más barato. Estoy seguro que le costaría un millón de euros menos. Además, se cuidaría y funcionaría mejor la instalación.
-¿Qué le parece la actual política deportiva del Gobierno Local?
Lo primero que quiero decir es que como consejero de Deporte, no tuve el apoyo de la Consejería de Fomento en el tema de las instalaciones, así de claro. Tengo hechos y pruebas. En el Pabellón de Deporte Guillermo García Pezzi, las losas que están tiradas en el exterior desde hace un año siguen ahí. Yo he venido denunciando eso y más. Y en cuanto la Piscina Municipal, cuando se hizo la obra, que es lo único que me ha hecho Fomento, tuvimos que arreglar aparte los vestuarios y la iluminación, con un proyecto de algo más de un millón de euros de la empresa COBRA. Nos dijeron que la obra se haría en tres meses y que terminaría en el mes de septiembre, pero dije que llegaba marzo o abril del siguiente año y no estarían finalizadas, como así ha ocurrido. Se hizo una buena mejora en la piscina, pero siguen habiendo fallos. No obstante, la Ciudad se va a ahorrar 60.000 euros al año, ya que se suprimió el gasoil por unas placas solares y un sistema muy bueno, pero hay cuatro fallos que se le exigió a la empresa porque la gente se cortaba en los filos de la piscina y el trampolín no estaba homologado. Son cuatro cositas, pero muchas veces los técnicos… Si yo hubiera la ayuda de Fomento, las instalaciones estarían mucho mejor y tendríamos un pabellón construido, que nos hace falta. En Melilla, contamos con 44 instalaciones deportivas públicas para atenderlas y es imprescindible un pabellón de uso y otro con vistas a estar en la ACB, lo cual es rentable a la larga.
-¿Ha podido hablar con el nuevo consejero de Deporte?
Sí, pero le aconsejo que actúe por sí solo, que no le haga caso a los que tiene a su alrededor. Yo ya no estoy en el Gobierno, pero soy un hombre al que le gusta el deporte y la mejor historia se ha escrito bajo mi mandato como consejero. Aquí se han traído eventos deportivos que ya no volveremos a ver nunca más. Con Rachid Bussian he conversado y sé que él habla bien de mí, lo cual se lo agradezco, pero hay cosas que se ha encontrado por el coronavirus, ya que se han suspendido diferentes eventos, como la Africana, la Copa de Europa de Triatlón, la Semana Náutica… Se ha visto obligado a recortar un 11 por ciento la subvención de los clubes y estoy de acuerdo en ello, por la situación en la que nos encontramos. También estoy de acuerdo con él en el recorte del presupuesto para la próxima temporada de los clubes en categoría nacional.
