Javier Iglesias Martín es, de momento, el único candidato a las elecciones a la presidencia de la Federación Melillense de Ciclismo, aunque desde el pasado mes de febrero viene ejerciendo, de forma provisional, en el cargo de máximo exponente de la Territorial Melillense, puesto que el anterior presidente, Francisco Lomeña, renunció al cargo por motivos personales. El deportista melillense, de 41 años de edad, tiene como objetivo darle un gran impulso a la Federación Melillense “para darle a este deporte el protagonismo que realmente merece”. El candidato a la presidencia de la Federación Melillense de Ciclismo ha practicado desde su infancia numerosas modalidades deportivas y desde entonces permanece ligado al mundo del deporte, “primero con el kárate, junto a mi padre, y después al fútbol”. De igual modo, resalta que “tengo la suerte de haber conseguido bastantes trofeos y medallas a nivel local en estas disciplinas deportivas, y en cuanto al ciclismo, sin duda alguna, lo más importante fue ganar junto a mi compañero Nacho Herrera la categoría Ambassador de la Titan Desert 2019”.
-¿Cómo se inició en el ciclismo?
Desde niño era un amante del ciclismo y me pasaba las horas viendo el Tour de Francia, el Giro de Italia y la Vuelta Ciclista a España, pero no fue hasta noviembre de 2013, tras la segunda operación de mi rodilla, y por recomendación médica, cuando me subí de verdad a la bicicleta. Al principio me costaba muchísimo llegar a hacer 30 kilómetros, y aún recuerdo cuando me decía a mi mismo que si iba a ser capaz de poder terminar La Africana de 2014. Y a partir de ahí ha sido todo un no parar.
-¿Cómo surgió la idea de participar en la Titan Desert?
Me gustaba ver los resúmenes de la Titan en Teledeporte y pensaba que era una carrera muy complicada, por lo que me prepuse que algún día podría hacerla. Y cuando llegué destinado a Melilla en marzo de 2017, por mi profesión, fue cuando empecé a tomarme en serio la posibilidad de acudir en 2018.
-Este año no se ha podido participar. ¿Me imagino que estará descontento por ello?
Es una sensación muy extraña. Por un lado, está la experiencia de al menos haber participado en la primera edición de la Titan Series Saudí Arabia, a finales de enero, y eso al menos te ayuda moralmente, pero tanto Nacho como yo teníamos la ilusión de defender el título del año pasado. De momento, se ha aplazado a la primera semana de noviembre, pero hay que ser realistas y es bastante difícil que se celebre. Habrá que esperar y de momento, seguir entrenando.
-¿Por qué se presenta a la presidencia de la Federación Melillense de Ciclismo?
Soy una persona muy inquieta fuera de mi trabajo. Me gusta asumir responsabilidades, y como desde que empecé a hacer la Titan Desert me he visto muy involucrado en el ciclismo en la ciudad, consideré que había que darle un impulso a la Federación que en los últimos años no tenía. Lo comenté con mi familia y varios ciclistas, y me dijeron que podría hacer un buen trabajo para volver a dar el protagonismo que se merece el ciclismo en Melilla.
¿Hay algún candidato más?
No hay más candidatos ni nadie que se lo haya planteado, al menos que yo sepa. De hecho, estoy ejerciendo de presidente desde primeros de febrero y nadie ha puesto ninguna objeción al respecto.
-¿Cuándo son las elecciones?
El período electoral comenzó el pasado mes de marzo y me dio tiempo a presentar la documentación del primer apartado de las elecciones. Con el estado de alarma, todo se paralizó, y aún estamos en el primer paso, que es de la presentación y exposición del censo electoral.
-¿Qué puede aportar Javi Iglesias al ciclismo?
De momento, un cambio radical en la forma de trabajar con respecto a años anteriores, estando más cerca del ciclista. Y por otro lado, muchas ideas y mucho trabajo. Tengo muchos proyectos que me gustaría llevar a cabo en dos o tres años, porque todo necesita un tiempo prudencial. Pero sobre todo, puedo aportar mi experiencia en carreras internacionales y nuevas ideas en cuantas competiciones locales, y volver a abrir la Escuela de Ciclismo infantil.
-Melilla celebró un Campeonato de España hace más de 20 años. ¿Para cuándo otra prueba nacional importante?
Me gustaría que fuese en 2021, y de hecho, ya les he transmitido al presidente de la Real Federación Española, José Luis López Cerrón, y al consejero de Urbanismo, Infraestructuras y Deportes, Rachid Bussian, la intención de solicitar una prueba nacional. La Federación me ha dicho que estarían encantados de venir a Melilla, pero al final, todo depende de los presupuestos de la ciudad.
¿Y de qué modalidad sería el campeonato?
Tengo previsto, siempre que tenga el visto bueno de la Ciudad Autónoma, solicitar el Campeonato de España de XCO o el de fondo en carretera en categoría máster. El de XCO sería muy interesante, puesto que al ser año olímpico, es la última prueba en la que participan los integrantes de la selección española, y muy probablemente, podrían estar en Melilla, lo que supondría un auténtico espectáculo.
-¿Cuenta ya con su equipo de colaboradores?
Estoy trabajando en ello. Mantengo el equipo de control y montaje de competición, así como el equipo arbitral, una parte imprescindible en la Federación. Después, hay varios miembros de la asamblea general que están dispuestos a seguir, pero ya he hablado con varios ciclistas que están interesados en colaborar conmigo, pero de momento no está totalmente definido el equipo.
El calendario de competiciones ha sufrido cambios. ¿Cómo se plantea ahora tras la situación del coronavirus?
A nivel local, tenemos previsto, si tenemos las autorizaciones de las autoridades sanitarias, de celebrar una contrarreloj de carretera en el mes de septiembre, y la Melilla Bike Challenge, una prueba de MTB de dos etapas por parejas. Son las grandes apuestas para lo que queda de año a nivel local, además de retomar a la tradicional Carrera del Pavo unos días antes de navidad.
-¿Qué le parece el carril bici y las carreteras para la práctica del ciclismo en Melilla?
El carril bici fue un acierto cuando lo hicieron, y ahora se le quiere dar continuidad ampliando algunos tramos y haciendo ciclo calles. Tengo constancia de que se está trabajando para dar las máximas facilidades a los ciclistas, a pesar de las limitaciones de espacio que tenemos, sobre todo mientras la frontera esté cerrada y no se pueda entrenar en Marruecos. Por otra parte, aún falta un poco de cultura de carril bici en la ciudad. Hay ciclistas que van muy rápido, hay personas que montan en bici que no saben aplicar las normas de circulación, o simplemente el sentido común, y después, hay corredores que lo usan, unos mejor que otros. En el fondo, hay sitio para todos, pero tenemos que intentar cumplir las normas de circulación y seguridad entre todos.
-¿Le ha hecho alguna petición a la Ciudad Autónoma para que habilite algunas zonas concretas para practicar ciclismo?
Hace dos semanas, solicité por escrito a la Consejería de Medio Ambiente que mantuviese cerrado al tráfico, al menos durante determinadas horas, la carretera de Rostrogordo y Aguadú, Paseo Marítimo de Horcas Coloradas y el Dique Sur. De momento, no he tenido respuesta, pero soy consciente que es muy difícil contentar a todos, porque habrá gente que piense que lo que es bueno para el ciclista, puede perjudicar a otros ciudadanos. Y viceversa.
