El presidente de Melilla, Eduardo de Castro, ha descartado que se vaya a someter a una cuestión de confianza, como hace dos días le pidió el PP a raíz de la rueda de prensa “muy atípica” que ofreció el líder de Cs el sábado y que dio lugar, según el PP, a un “episodio francamente vergonzoso”. A preguntas de los periodistas, De Castro recordó que la cuestión de confianza es algo que le corresponde única y exclusivamente al presidente, pero “es evidente” que no se plantea someterse a dicho instrumento porque dice tener la confianza de sus socios de Gobierno, Coalición por Melilla (CPM) y PSOE.
“Si en algún momento no ocurre eso, ya veríamos”, apuntó De Castro que, de todos modos, cree que la cuestión de confianza “no cabe por ningún sitio siendo rigurosos” con lo que establece el artículo 87 del Reglamento de la Asamblea, ya que dicho instrumento “se hace sobre cuestiones de programa y de política general”.
Sin embargo, recordó que “hace menos de un mes” la Asamblea aprobó con mayoría absoluta de 14 votos los Presupuestos Generales de la Ciudad Autónoma de 2020, los cuales “recogen los programas de los partidos” que integran el Ejecutivo y “la política general” de dichas formaciones.
“Siento que tengo la confianza de mis socios y la prueba está en que se han aprobado los presupuestos, que es el instrumento más importante de un Gobierno. No hay caso”, insistió De Castro.
A su juicio, el presidente regional del PP y expresidente de la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda, ha pedido que se someta a una cuestión de confianza “porque se le ha agotado el cartucho de la moción de censura”.
No obstante, arremetió contra su antecesor y afirmó que el propósito del PP es “tumbar” al presidente de la Ciudad Autónoma: “Yo estorbo. Son muchos años de poder [del PP], llevándose muchísimo dinero haciendo cuestiones, vamos a decir, irregulares”.
Auditoría
Por ello, anunció que ha encargado la realización de una auditoría urgente sobre la contratación menor en la anterior legislatura, gobernada por el PP en el mandato, en diferentes áreas del Gobierno pertenecientes y varios organismos y empresas de la Ciudad Autónoma.
Concretamente, la fiscalización de cuentas afectará a las áreas Festejos, Juventud, Cultura, Deportes, Consejería de Presidencia, Gabinete de Presidencia, Arquitectura y Urbanismo, Obras Públicas, Medio Ambiente y Educación. También se analizará la contratación menor realizada por el Instituto de las Culturas, el Patronato de Turismo o la Fundación Melilla Monumental, así como en la empresa pública Emvismesa.
Argumentó que “era una promesa” desde el inicio de este mandato, además de “un mandato” del Tribunal de Cuentas y el Consejo de Estado, que “ha enviado varios informes diciendo que es un desatino y un desastre como se han llevado las cuentas e invita a acudir a la Fiscalía, como ya se ha hecho en algún caso”.
Dicha auditoría, que se hace “para ver si hay cuestiones irregulares, teniendo el convencimiento de que tiene que haberlas”, dados los informes del Tribunal de Cuentas y el Consejo de Estado, se llevará a cabo con una empresa externa “para que no haya historias”.
Imbroda anuncia una querella por calumnias contra De Castro
Imbroda, en Twitter, respondió afirmando que la auditoría “debería empezar” por el año de gestión que lleva el Gobierno presidido por De Castro, concretamente en “las contrataciones que ha hecho en Emvismesa, Distritos, Festejos”.
Además, anunció que presentará “de inmediato” una querella judicial “ante las calumniosas declaraciones” de De Castro, del que aseguró que “no tapará con calumnias la vergüenza que dio verlo ante los medios” el pasado sábado en su comparecencia.
