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La Semana

Comunismo y Unión Europea no son compatibles

Leyendo el MELILLA HOY del sábado, el último que he leído cuando empiezo a escribir este artículo, me quedo con algunas primeras impresiones que, me parece, son convenientes considerar.

La primera conclusión es el barullo que produce la transmisión, por parte de nuestro periódico, “el periódico de Melilla desde 1985”, de tantas “noticias” políticas, tanto autobombo partidista, tanta falta de concreción en los plazos (en agosto, dentro de dos meses, se conocerá el sistema de enseñanza que se implante en Melilla, por citar un solo ejemplo), en las cantidades (los préstamos que la Ciudad va a pedir), el transporte marítimo (con la mosca detrás de la oreja y sin contrato marítimo), en lo deportivo (sin respuesta de un consejero que no toma decisiones en su área hasta que no recibe ordenes partidistas superiores), sin fecha para la reapertura de mezquitas a pesar de la bulla de las numerosas Asociaciones afectadas) y así un largo, interminable y diario etcétera. Como escribe Pepe Megías en su “Melilla levántate”, y por citar solo un ejemplo de entre las muchas inconcreciones, “los del PSOE son los del gerundio (permanente): pensando, aprendiendo, estudiando, trabajando (eso lo añado yo), etc. Ella (Gloria Rojas) habla con el jefe, pero no lo comunica por discreción. Yo (Pepe Megías) he llegado a la conclusión de que no habla nunca con Sánchez”. Yo, Enrique Bohórquez, también llegué hace tiempo a la misma conclusión, añadiendo que si alguna vez habló, no le ha hecho el menor caso, como los hechos demuestran.

La segunda conclusión, que liga con lo que escribí en mi Carta del Editor de ayer, con el titulo de “La ignorancia de las masas es la principal fuerza de los gobernantes”, me la proporciona José Megías, amigo de hace ya muchos años, en su posdata del artículo del sábado, que reproduzco (con algunas correcciones gramaticales): “A los que se dedican a difundir malévolamente infundios sobre mis intenciones les pido que escriban y den la cara, en vez de dedicarse a hacer la pelota a su jefe”. La ignorancia, el miedo y la sumisión son los que posibilitan a los tiranos. Lo de no dar la cara y no escribir es un mal enormemente extendido en Melilla. Todos critican, todos pretenden que los demás les defendamos, pero todos -casi todos- se niegan a escribir y a dar la cara, todos -excepto algunos, pocos, funcionarios públicos con los puestos públicos ya consolidados- temen las represalias contra ellos, sus familiares, sus amigos. Así, con tanta corrupción elegida (hay muchos tipos de corrupción), somos un pueblo -al elegir por ignorancia, miedo y sumisión, a corruptos tiránicos- no tanto de víctimas, como de cómplices del desastre.

Ni el Gobierno presidido por Pedro Sánchez ni el presidido por Eduardo de Castro pueden durar mucho, porque la ruina, los impagos, las mentiras descubiertas (sobre las pensiones, como hizo Zapatero, por ejemplo), los despilfarros públicos, les echarán. El camino comunista, el de más y más Estado, el de las declaraciones del comunista Alberto Garzón, nada menos que ministro de Consumo, nos lleva inevitablemente a la insoportable catástrofe. El camino que deberíamos seguir es el que nos indican jóvenes economistas bien formados en el extranjero, como Francisco Bohórquez: “Las crisis no ocurren por un exceso de producción, sino cuando se produce mal, cuando lo que se produce ya no es consumido por los consumidores y si el Estado -como hacen los comunistas- se empeña en mantener dicha producción mediante subsidios o rescates, no está luchando contra la ineficiencia del sistema capitalista, está perpetuando la ineficiencia, al no permitir el ajuste necesario en la producción y al retener unos recursos que se podrían dedicar a otras áreas que los consumidores valorasen y necesitasen más”.

Resumiendo: Comunismo y Unión Europea -con sus imprescindibles ayudas- no son compatibles. Habrá que decidirse. Unos, los del actual Gobierno nacional, ya se han decidido por el comunismo; otros, el Gobierno local, por seguir manteniendo un avispero incapaz de gobernar con una mínima eficacia. Ahora nos toca a nosotros, los ciudadanos, decidir si seguimos siendo cómplices, además de víctimas.
¡Ah! Y lo que es más importante para muchos españoles: ha vuelto el fútbol.

Frases

Lo de no dar la cara y no escribir es un mal enormemente extendido en Melilla. Todos critican, todos pretenden que los demás les defendamos.

El Gobierno nacional ya se ha decidido por el comunismo; el Gobierno local, por seguir manteniendo un avispero incapaz de gobernar con una mínima eficacia.

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Enrique Bohórquez López-Dóriga

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