En el escrito, Ahmed Moh ha señalado que “insto y sugiero que se hagan las gestiones pertinentes para contactar con estas empresas con el fin de regularizar y normalizar esta situación”.
Asimismo, ha subrayado que “las entidades firmantes no aprobarán ningún pago en tanto y en cuanto no se subsane esta anomalía”. Moh ha recordado en su escrito que “legalmente dicha deuda no se puede subsanar con ninguna subvención futura”. Por ello, ha insistido una vez más a la antigua dirección y las entidades que las sustentan, en concreto Badr y el Consejo Religioso Musulmán, “que nos faciliten la documentación contable con el fin de normalizar y actualizar el órgano de gobierno” de la CIM.
Por último, en declaraciones a este medio, ha dicho que “transparencia claridad y legalidad es el único interés que tiene esta entidad y no va a permitir los chanchullos, enjuagues, manejos, confabulaciones, trampas, tejemanejes y enredos que ha habido con la anterior directiva”.