La Guardia Civil ha llevado a cabo el golpe más importante contra el narcotráfico este año en Melilla con la intervención de 191,3 kilos de hachís que transportaba un camionero en las ruedas de repuesto de su vehículo, que pretendía embarcar vacío en un buque destino a Almería. El conductor ha sido detenido como presunto autor de un delito contra la salud pública. En una nota de prensa, la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla ha informado de que esta importante actuación contra el narcotráfico tuvo lugar el pasado 7 de julio, durante la inspección en el preembarque de un camión Iveco de matrícula nacional que articulaba un semirremolque con placas nacionales.
Los agentes observaron ciertas irregularidades en el interior de las ruedas de repuesto, lo que le hizo sospechar de la posible ocultación de géneros ilícitos, por lo que se solicitó el traslado del vehículo a dependencias de la Comandancia General para su desmontaje con suficientes garantías de eficacia y seguridad.
Desmontaje en la ULOG24
Una vez en los talleres de la Unidad Logística número 24 de Melilla (ULOG24), el Equipo de Registro de la Guardia Civil, junto con especialistas mecánicos de dicha unidad militar, y en presencia del conductor del camión, procedieron al desmontaje de las dos ruedas de repuesto, donde se localizó droga oculta.
En concreto, había 354 paquetes de diferentes formas y tamaño escondidos en el interior de las ruedas que contenían una sustancia verdosa, la cual, una vez analizada, ha resultado ser indiciariamente polen de hachís, que contiene la más alta concentración del principio activo de este tipo de estupefaciente.
Los 354 paquetes pesaban en total 191,3 kilos, por lo que es la intervención más voluminosa de las que ha llevado a cabo la Guardia Civil este año en el puerto de Melilla.
La Guardia Civil ha detenido al conductor y único ocupante del camión, un varón de nacionalidad española y 48 años que cuenta con antecedentes policiales de esta naturaleza, el cual será puesto a disposición judicial como supuesto autor de un delito contra la salud pública, junto a la droga intervenida y el vehículo utilizado en la comisión del ilícito penal.
Con esta actuación, la Guardia Civil evita la distribución y comercialización en el mercado ilícito del orden de 770.000 de este tipo de estupefaciente.
