En Melilla es, desde hoy, obligatorio utilizar mascarilla para evitar la propagación del coronavirus. Esta medida se aplicará con independencia de que se cumpla la distancia de metro y medio entre personas. Su incumplimiento conllevará una sanción de 100 euros. El superintendente de la Policía Local, Luis Miguel Palacios, dio a conocer ayer a todo el personal del Cuerpo cómo debe proceder ante esta medida mediante una orden para el servicio.
El uso de la mascarilla será obligatorio para todo el mundo tanto en espacios públicos como privados, abiertos y cerrados, aunque habrá algunas excepciones, concretamente los menores de seis años, las personas con problemas respiratorios o con discapacidad, en la playa y la piscina y durante la realización de actividades físicas y deportivas. También en aquellas actividades que por la naturaleza del hecho haga imposible la utilización de la mascarilla, como el consumo de comidas y bebidas en establecimientos hosteleros.
