Un padre de familia se ha puesto en contacto con este Diario para denunciar la situación que está viviendo con su mujer y sus tres hijos en una vivienda de la calle Infanta Elena que “está en ruinas” y que desprende un olor “muy fuerte” a humedad. Explica que llevan dos años “aguantando” en esta situación viendo como el techo se les cae porque ni el dueño ni EMVISMESA le han dado ninguna solución. Un padre de familia con tres hijos pequeños, residentes en Melilla, quiso denunciar la situación que están padeciendo en su vivienda sita en la calle Infanta Elena, nº21, ya que “se les cae encima” porque está “prácticamente en ruinas”.
Contó que llevan aguantando en esta situación desde hace dos años, aunque actualmente está a la espera de juicio porque su casero no ha querido arreglarles los desperfectos ni tampoco el techo o las humedades que producen un “olor incesante”.
Indicó que fue a solicitar una nueva casa a EMVISMESA y les dijo que tenía muchas humedades y que no podían vivir así por sus tres hijos. “Me dijeron que no tenían casas, no me dieron ninguna solución ni me dijeron lo que podía hacer”, sostuvo.
Este melillense remarcó que, por culpa del estado de la casa, uno de sus hijos está enfermo con temas de la alergia ya que se genera “mucho polvo” diariamente y le impide poder respirar adecuadamente.
Expuso que entraron en el año 2015, y antes la casa estaba bien, luego empezaron a aparecer humedades, las paredes y el techo “comenzaron a caerse y también la pintura”.
“Se lo dije al dueño que por favor nos arreglara la casa y me vaciló, tuve que denunciar el asunto, al final me dijo que me lo iba a arreglar, pero no lo ha hecho y me ha mandado una carta diciendo que el contrato se había acabado y que nos fuésemos”, dijo.
Este padre aseguró que está intentando buscar otra casa, le piden muchas nóminas y cree que “nos estamos matando mis hijos y yo mismo porque en esta vivienda no se puede vivir”.
“Durmiendo con humedad”
Comentó que su hijo mayor cuando ha tenido que hacer alguna videollamada del colegio, se tenía que poner el dormitorio de los padres para que no se viera cómo está la casa, “ni sus amigos vienen a casa, le da vergüenza invitarlos”.
Apuntó que sus niños están durmiendo rodeados de humedad, se cae la pared encima porque “no las han querido arreglar, tengo vecinos al lado que sus casas está perfectamente, pero en esta casa tienes que estar limpiando la casa todo el día por el polvo”. Incluso señaló que tiene que abrir la puerta principal todas las mañanas para que salga los olores de la casa porque es “insoportable el olor fuerte a humedad”.
Este padre de familia resaltó que hace unos días se le cayó el techo y llamó a los bomberos porque “se nos caía encima, me dijeron que era la humedad de arriba, les dije que estaba seco, y vinieron a hacer un parte, menos mal que no se le cayó a uno de mis hijos encima”.
“Solo quiero algo para vivir con mis hijos con dignidad, llevamos dos años aguantando de esta manera, y esperamos que alguien nos pueda ayudar”, concluyó.
