La ministra de Defensa, Margarita Robles, tiene previsto llevar este martes al Consejo de Ministros la aprobación de una medalla para los miembros de las Fuerzas Armadas que participaron en la Operación Balmis de lucha contra el coronavirus. Robles anunció hace ya unas semanas esta medalla como reconocimiento al esfuerzo demostrado por todos los miembros de las Fuerzas Armadas durante el estado de alarma, colaborando en las labores de lucha contra el Covid-19. El objetivo es premiar con un reconocimiento específico a todos los militares que han formado parte de esta misión, y que reúnan las condiciones requeridas, como agradecimiento al “esfuerzo, vocación y espíritu de sacrificio” demostrado, según detalló la ministra.
Las Fuerzas Armadas dieron por concluida la Operación Balmis el pasado mes de junio tras 98 días en los que las Fuerzas Armadas han realizado casi 20.000 intervenciones en 2.300 localidades con “el único objetivo de salvar vidas”.
La labor de los militares en la calle se centró en labores de desinfección de infraestructuras críticas y servicios esenciales –con especial hincapié en las residencias de ancianos–, labores de transporte de material, colaboración con Policía y Guardia Civil en labores de seguridad, montaje de hospitales de campaña o traslado de enfermos y fallecidos durante las semanas de mayor incidencia de la pandemia.
Casi 1.300 militares en Melilla
En Melilla, la Operación Balmis ha supuesto la movilización de un total de 1.289 efectivos militares, de los cuales la gran mayoría, 1.158 concretamente, estuvieron destinados a la vigilancia del perímetro fronterizo.
Las unidades de la Comandancia General de Melilla desarrollaron 320 misiones que la Delegación del Gobierno de la Ciudad solicitó al Ministerio de Defensa durante los más de tres meses que estuvo en vigor el estado de alarma en todo el territorio nacional.
La misión donde más efectivos se dedicaron fue el apoyo a la Guardia Civil en el control de la frontera, misión que se ha realizado durante 82 días ininterrumpidamente, en la que participaron sucesivamente un total de 1.158 militares.
Además, se llevaron a cabo 37 patrullas de presencia y reconocimientos por unidades de tipo pelotón, con un total de 75 militares implicados.
Otra de las misiones fue el apoyo sanitario a la Autoridad Portuaria de Melilla para realizar un triaje (toma de temperatura y realización de una encuesta) a todo el personal que ha desembarcado en el puerto desde el buque de línea regular, en la que han participado 26 de diferentes unidades, que han controlado a 2.900 personas.
También apoyaron con un equipo de duchas de campaña de la Unidad Logística número 24 (ULOG-24) a cientos de personas que se han quedado bloqueadas en Melilla por el cierre de la frontera, primero en las instalaciones del Complejo V Pino, y posteriormente en la Plaza de Toros.
De igual modo, se realizaron descontaminaciones del Hospital Comarcal, los 4 centros de salud de Melilla, el Centro Polivalente de Servicio de Mayores de Melilla y el edificio V Centenario.
En esta misión participó un equipo de desinfección no específico NBQ de la ULOG-24 y un equipo de desinfección específico sobre la base de la unidad de veterinaria de la Unidad de Servicios de la Base Discontinua (USBAD) Teniente Flomesta.
De igual modo, instalaron dos tiendas modulares y un kit de iluminación y electricidad del Batallón de Cuartel General de Comgemel, en apoyo al 061.
Además de las capacidades solicitadas a la Comgemel, las unidades se mantuvieron en total disponibilidad para afrontar cualquier misión adicional en la Operación Balmis, que se dio por finalizada el pasado 21 de junio.
