Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Logo de Melilla hoy

Jorge Vera muestra los beneficios del aula invertida donde se centra en el estudiante y su aprendizaje

El director de la Escuela Miguel Marmolejo, Florindo López, junto a Jorge Vera Sosa

Jorge Vera Sosa, jefe de Departamento de Historia del Arte de la Escuela de Arte Miguel Marmolejo, ha conseguido el primer premio Josep Albert Mestre a la Investigación para la mejora educativa mostrando los beneficios del aula invertida, un método de enseñanza que se centra en el estudiante y su aprendizaje. El docente melillense ha puesto en práctica esta metodología dos años seguidos con su ciclo formativo de grado superior de amueblamiento y asegura que ha tenido un “éxito enorme”. El objetivo del aula invertida y la interdisciplinaridad es basarse en procesos de aprendizaje, desarrollo de habilidades y destrezas a través de los recursos TIC para que el alumnado sea más competente en el mercado laboral.

La Confederación de Escuelas de Artes Plásticas y Diseño ha concedido el galardón Josep Albert Mestre a la propuesta “Aula invertida e interdisciplinariedad en las enseñanzas profesionales de Artes Plásticas y Diseño” presentada por el docente melillense Jorge Vera Sosa de la Escuela de Arte Miguel Marmolejo.

Jorge Vera indicó a este Diario que el aula invertida es una metodología “bastante innovadora” que no ha llegado a todos los niveles educativos ni etapas ni regímenes, con algunos trabajos de investigación aplicados a Primaria y a Secundaria y otros dirigidos a la Formación Profesional de un ciclo formativo de emergencias sanitarias en Sevilla con unos “resultados magníficos”.

¿Qué es el aula invertida?
Explicó que el aula invertida tiene como objetivo centrarse en procesos de enseñanza aprendizaje, desarrollo de habilidades y destrezas para que el alumnado sea “más autónomo en su trabajo” utilizando recursos TIC “muy afines” al alumnado con un lenguaje común.

Asimismo, recalcó que estos recursos en la enseñanza son “más motivadores” porque es huir de la clase tradicional de exposición como comunicador y un enfoque “más de memoria” para pasar a un rol donde el docente es más un coordinador y que el alumnado tenga una actitud más participativa.

La finalidad es que el contenido se envíe a los alumnos a través de plataformas digitales para que antes de la sesión ya tengan una idea previa y así en clase tengan más tiempo para resolver sus dudas y que el docente pueda atender los diferentes ritmos de aprendizaje de forma mas individualizada con una evaluación de diagnóstico sesión por sesión sabiendo en qué nivel se encuentra cada uno y comprobando qué objetivos se cumplen en cada uno de ellos.

El docente melillense ha podido poner en marcha el aula invertida en el curso 2018-2019 en el segundo curso del ciclo formativo de grado superior de amueblamiento a través de la materia ‘Módulos, historia del mueble’ donde pudo utilizar la metodología sin los recursos TIC y en este año, que ha podido ha sido un “éxito enorme”.

Apuntó que usó un instrumento de medición y el alumnado valoró “de forma aplastante” que prefiere una educación menos memorística y más basada en los recursos TIC a través de plataformas y trabajos prácticos orientados a las competencias profesionales del título.
Además, Vera resaltó que incluyó la interdisciplinariedad porque se trata de un ciclo con módulos de mucho peso y también realizaban actividades no solo teniendo en cuenta los objetivos de cada materia sino los generales del ciclo.
Por último, el docente quiere agradecer tanto el apoyo de la Escuela de Arte Miguel Marmolejo, como de su director Florindo López y la jefa de estudios, Bárbara Judel.

“Este método podría extrapolarse a Primaria y Secundaria”
En cuanto a si se podría extrapolar el aula invertida a Secundaria, Bachiller o Primaria, el docente respondió que sí porque hay trabajos de investigación sobre esta metodología con “un éxito aplastante”.

Respecto a la evaluación en el aula invertida, Jorge Vera expuso que se tiene que tener muy en cuenta la de diagnóstico ya que se centra y hace que se pueda tener un control, desarrollo y progreso del alumno, pero también debe hacer una evaluación calificativa. Aunque, dejó claro que la de diagnóstico se desarrolla con una disparidad de elementos mas completos para evaluar esos rasgos de la metodología e hizo hincapié en la importancia de las actividades prácticas porque son pruebas “lo más reales y útiles en el futuro”.

Loading

Lorena Japon

Más información

Scroll al inicio

¿Todavía no eres Premium?

Disfruta de todas
las ventajas de ser
Premium por 1€