Los dos empresarios de hostelería de la Plaza de las Culturas, padre e hijo, han negado los extremos recogidos en el comunicado de prensa de la Jefatura Superior de Policía emitido el pasado 18 de junio, en el que señalaba que tenían a dos trabajadores en condiciones de “semiesclavitud”, y aseguran que todo obedece a una obra de caridad que quisieron tener con uno los empleados y un “lavacoches” que desarrollaba su labor en las inmediaciones, tras el cierre de la frontera de Melilla con Marruecos del pasado 13 de marzo. A través de un comunicado de prensa, los afectados por una noticia que les está causando un gran daño a su honorabilidad y su prestigio han subrayado que el hecho de que ambas personas durmieran en el local de hostelería no era por cuestiones laborales ni con una “explotación laboral”, como se afirma en la nota de prensa, sino a un favor que quisieron hacer a estas dos personas que no cuentan con casa en Melilla y evitarles así que tuvieran que solicitar acogida en centros como el Pabellón Lázaro Fernández, V Pino o Plaza de Toros, con el fin de cumplir con la cuarentena y así darles cobijo en la cafetería tras el cierre fronterizo.
Por ello, han expresado su malestar e indignación por haber convertido una obra de caridad en una noticia de suceso en la que se hablaba de términos tan fuertes como “semiesclavitud”, “explotación laboral” o jornadas de trabajo de 18 horas por 120 euros.
No fueron nunca detenidos
Los empresarios, padres e hijo, también han negado que en ningún momento hubieran estado detenidos y que solo acudieron a la Jefatura Superior de Policía cuando fueron requeridos, por lo que lamentan el daño que les ha causado la noticia de una detención que nunca existió.
Los afectado han mostrado su malestar por los daños y perjuicios ocasionados por una información que no se ajusta a la realidad, como demostrarán ante la Justicia, y que se haya convertido una obra de caridad en una noticia de sucesos surrealista, exagerada y carente de toda veracidad. “Lo que nos ha ocurrido a nosotros le podía haber sucedido a cualquier persona que hubiera tenido corazón y hubiese ayudado a dos personas que quedaron atrapados en Melilla por el cierre fronterizo, y que ahora nos lo quieren volver en contra” han apuntillado.
