El viceconsejero del Menor y la Familia, Abderrahim Mohamed, acudió ayer a La Espiguera a la clausura de el proyecto de reinserción social a través del fútbol con la participación de 170 menores acogidos en los diferentes centros de entre 12 y 17 años. El director de la Fundación de la Federación Melillense de Fútbol, Javier Ventaja, explicó que el objetivo inicial era premiar un comportamiento correcto en los distintos centros con esta actividad lúdica que les permite desarrollarse en una faceta deportiva, pero también cultural por la multitud de actividades que realizan como visitas guiadas para que conozcan la ciudad y su cultura. Abderrahim Mohamed, viceconsejero del Menor y la Familia, clausuró ayer el proyecto de reinserción social para menores acogidos de la Ciudad a través del futbol que ya se subvencionó el año pasado.
Asimismo, hizo hincapié que los menores en los centros residenciales y menores tutelados por la Ciudad tienen “la necesidad de tener ese ocio, tiempo libre a través del deporte”. Resaltó que es innovador porque no solo afecta a la faceta deportiva, sino que se recoge también la faceta cultural y social en cuanto visitas guiadas, formación del propio alumnado, etc.
Indicó que se ha inclinado más a la faceta deportiva por ser un aspecto fundamental para cualquier ciudadano, especialmente para un menor acogido que no tiene esa posibilidad de demostrar su valía, por lo tanto, para “su desarrollo y crecimiento personal era fundamental apoyar este proyecto”.
Mohamed dejó claro que el proyecto no solo estaba dirigido a menores tutelados sino también a residentes en la ciudad tratándose de un “proyecto integrador, de inclusión, para que el menor no se sienta aislado o marginado”.
Javier Ventaja, director de la Fundación de la Real Federación Melillense de Fútbol, explicó que este programa de reinserción social es anual y durante todo el año hacen actividades con la Escuela de Fútbol donde participan chicas y chicos, aunque del centro de menores suelen participar más niños de la categoría juvenil.
En total, detalló que han participado 170 menores del centro La Purísima y Gota de Leche hasta los 12 años. Además, intentan hacer competiciones integradoras con los distintos niños de Melilla con el objetivo de trabajar esa inserción social a través del fútbol.
Con las medidas del COVID, contó que ha sido todo “más difícil” y esperan que a partir de septiembre puedan seguir desarrollando el proyecto tal y como estaba planificado.
“Hemos hecho actuaciones intentando esa inserción social con visitas guiadas porque es importante que los alumnos conozcan la ciudad y la cultura”, sostuvo.
Como novedad este año, Ventaja destacó que han incluido una nueva actividad, los e-sport a través de videojuegos “que les va a permitir participar en actividades futuras ya que se trata de otro tipo de inserción social”.
Con el COVID, aseguró que las interacciones sociales de forma virtual es una herramienta muy buena, los menores la han conocido, manejado y en futuras actividades esperan incluirlos como una herramienta más de inserción social.
