La Ciudad Autónoma de Melilla ha mostrado su interés por acogerse al ofrecimiento del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de poner a disposición de las autonomías 2.000 efectivos del Ejército para labores de rastreo de la COVID-19, debido al aumento “exponencial” de contagios que sufre Melilla. Según ha informado el Gobierno de Melilla, su presidente, Eduardo de Castro, ha dirigido un escrito al ministro de Sanidad, Salvador Illa, tras hablar con la ministra de Defensa, Margarita Robles, pidiendo ayuda en este sentido, ya que “vendría a aliviar la carga de trabajo” que sostiene dicha administración.
Con la incorporación de este personal, De Castro dice que se podría seguir el rastreo de los contagios en Melilla en colaboración con las autoridades locales y del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa), ya que en Melilla se ha visto incrementado “de forma exponencial” el número de casos activos en las últimas jomadas.
Por ello, le solicita que puedan asignarse “el número de efectivos que corresponda”, dando traslado de esta petición al ministro de Sanidad, y ha dicho quedar a la espera de su confirmación y de cuándo podrían producirse las incorporaciones.
De Castro, en su carta, pone de manifiesto a Illa la colaboración de la Ciudad Autónoma “en todo momento en esta lucha compartida”.
Imbroda también lo sugirió
El Gobierno de Melilla anunció esta petición en su perfil de Twitter una hora y media después de que el presidente regional del PP y expresidente melillense, Juan José Imbroda, preguntara en la misma red social por qué la Ciudad Autónoma no pedía la colaboración de los rastreadores del Ejército, al considerar que podrían ser “un apoyo importante».
Sin embargo, De Castro le respondió en Twitter que dicha gestión “ya estaba hecha” y, aunque apuntó que el Gobierno y los ciudadanos agradecen “una oposición útil y constructiva”, especialmente “en tiempos en los que la salud de todos está en juego”, le reprochó que “por Melilla no se trabaja a golpe de tuit”.
