La Delegación del Gobierno en Melilla ha anunciado que “en breve” se producirá un traslado de inmigrantes hacia la península, el tercero desde el inicio de la pandemia, aunque en esta ocasión no será de residentes en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), sino en el centro de acogida habilitado en la Plaza de Toros. En rueda de prensa, la delegada del Gobierno en Melilla, Sabrina Moh, avanzó que este traslado, que se está preparando desde hace una semana, será para inmigrantes vulnerables o sujetos a protección internacional.
De esta manera, negó que este traslado esté relacionado con el motín que tuvo lugar anteayer en el CETI, que empezó con una protesta de unos 200 residentes exigiendo que los lleven a la península, y dejó claro que corresponde a “una hoja de ruta” en la que ya se estaba trabajando.
“No es por la situación vivida en el CETI y no se va a acelerar ningún traslado porque haya una actitud violenta o un acto incívico, sino que los traslados se harán cuando se tengan que realizar”, aclaró aludiendo al motín que se produjo en el centro migratorio, por el que fueron detenidos 33 de sus residentes y resultaron heridos 21 agentes y vigilantes de seguridad.
Así, explicó que las conversaciones con el Ministerio del Interior y el Ministerio de Migraciones estaban ya avanzadas para efectuar este traslado para “descongestionar” las instalaciones, ocupadas por unas 450 personas, lo que hace unos días el consejero de Salud Pública, Mohamed Mohamed Mohand, calificó como “situación límite”.
Pruebas
Para ello, destacó la delegada, es necesario hacer un trabajo previo para comprobar la situación documental de estas personas y su situación sanitaria.
De hecho, en estos momentos se está a la espera de recibir el resultado de las pruebas a las que deben ser sometidos los inmigrantes para hacer un traslado a la península, como son las del VIH, la hepatitis y el mantoux, además de la PCR para comprobar que no está infectado de coronavirus.
También en el caso de los núcleos familiares, sus miembros deben ser sometidos a pruebas de ADN para comprobar dicho parentesco porque, como ha señalado Moh, la mayoría acceden a Melilla de forma separada.
En este caso, la delegada del Gobierno indicó que las pruebas de ADN ya están hechas y tienen sus resultados, pero es necesario finalizar el resto algo que, cuando suceda, se procederá al traslado si se comprueba que los inmigrantes cumplen con todos los requisitos para su salida.
En este punto, subrayó que no todos los residentes del CETI son susceptibles de traslado a la península, como es el caso de aquellos que tienen decretada una orden de expulsión del país, y dejó claro que, si este colectivo fuera objeto de traslado, no se estaría haciendo bien el trabajo.
